El nuevo Plan del Español mira a los profesionales y al mercado asiático
La Junta quiere «descentralizar» la oferta, que ahora acapara Salamanca
Según los datos publicados en los anuarios del Instituto Cervantes , la cifra de alumnos que estudian español como lengua extranjera en todo el mundo ha pasado de 18 millones a 21 en los últimos cuatro años, lo que supone un incremento del 17 por ciento en la demanda de cursos de español a nivel global. Otro dato a tener en cuenta, la previsión de expansión del idioma español a nivel mundial, que calcula su punto álgido en 2050, con unos 754 millones de personas con habilidades de comunicarse en todo el mundo.
En este contexto, y teniendo en cuenta que al igual que existe una mayor demanda de aprendizaje del español también la oferta va creciendo, fundamentalmente de mano de los países latinoamericanos, la Junta de Castilla y León ha dado una vuelta de tuerca a su Plan del Español, que en su tercera edición mira a colectivos profesionales como un nuevo nicho de demanda. «Es lo que se llama español para fines específicos», explica a ABC la directora general de Políticas Culturales, Mar Sancho , quien recuerda que a diferencia de éste, el anterior plan «se volcaba principalmente en el estudio del español para alumnos de Secundaria y universitarios que venían a estudiar el idioma como complemento a su formación». En este sentido, pone el siguiente ejemplo: «En Estados Unidos hay muchísima demanda de profesionales del sector jurídico, ya que cada vez la población que habla español es mayor». Así, según las cifras que maneja también el Instituto Cervantes, si en 2015 la población hispana de Estados Unidos era de algo menos de 57 millones, el incremento previsto alcanzar en el año 2060 es del 110 por ciento .
No es la única novedad que presenta este programa cuyo plazo para presentar alegaciones a través del Gobierno abierto acaba de expirar esta misma semana. Otra de las características específicas del nuevo programa es que busca trabajar con prescriptores locales, «aquellas personas -fundamentalmente profesores- que se conviertan en aliados de Castilla y León, ya que conocen sus buenos servicios para el aprendizaje del español», con la idea es que lo divulguen en sus entornos. Se prevé llegar a los 1.100 al terminar 2020 , su periodo de vigencia.
Pero el nuevo plan no sólo se centra en incrementar y diversificar los nichos de demanda, sino también en la oferta. Este incremento se perseguirá a través del a poyo a la creación de nuevas empresas y al aumento de la dimensión de las que ya están presentes en el sector, así como mediante medidas que fomenten la diversificación de los servicios ofrecidos, especialmente en cuanto a la implantación de soluciones innovadoras. «Creemos que el sector en Castilla y León no es tan grande frente a la amplísima demanda. Tenemos a las universidades y un número de escuelas que tampoco es grande. Y además, es una oferta muy centralizada en Salamanca», añade Sancho. Basta con ver las cifras del pasado año para darse cuenta de tal afirmación. En 2017 hubo un total de 46.256 alumnos de español como lengua extranjera , pero de ellos un 65 por ciento se ubicaron en Salamanca, seguida muy de lejos por Valladolid (un 11 por ciento), y Segovia (con un 10 por ciento).
¿Pero cómo «descentralizar» la oferta o al menos repartirla de manera más equitativa? Es verdad, admite la directora general de Políticas Culturales, que Salamanca «tiene un potencial muy importante debido al reconocimiento que tiene su universidad por parte de los extranjeros», pero también recuerda otras experiencias que están teniendo éxito como el centro de la Universidad de Washington que está instalado en León o el Centro Internacional Antonio Machado de Soria . En este sentido, Mar Sancho hace hincapié en la innovación: «Cuando hablamos de innovar no sólo queremos referirnos a nivel tecnológico sino a que haya novedad en la oferta» y añade la posibilidad de ubicar proyectos en el medio rural o «vincular el aprendizaje del español a temas culturales, patrimoniales o de naturaleza». «Salamanca tiene un rol importante, pero el resto de provincias tienen una gran capacidad de crecimiento», subraya.
Precisamente el de la Innovación es uno de los tres ejes estratégicos en los que se articula el tercer Plan del Español con el fin de acelerar la transformación y adaptación tecnológica de las empresas activas y además, entre otros objetivos, mejorar la capacitación de los profesionales del sector y difundir la imagen innovadora de Castilla y León a través de la Red Mundial de Hispanistas , que prevé llegar a los 19.000 usuarios en 2020. El otro de los ejes estratégicos tiene que ver con el «Emprendimiento y dimensión del sector» y en él destacan, entre los objetivos, apoyar la creación de nuevas empresas de enseñanza del español; ampliar las sinergias del sector con el resto de industrias culturales -artes escénicas y musicales, archivos, artes plásticas, patrimonio cultural, etc.-, e incrementar el número de centros de enseñanza del español para extranjeros acreditados por el Instituto Cervantes -actualmente 29 y se prevé llegar a los 33 en 2020-.
Por último, el tercer eje estratégico tiene que ver con la «Internacionalización» y en él, además de mirar a los colectivos profesionales y estimular la demanda en mercados tradicionales en los que la capacidad de crecimiento es aún considerable, se mirará también a otros mercados nuevos o poco explorados hasta el momento, «principalmente los países asiáticos», especifica Mar Sancho. En este sentido, recuerda el plan que este citado grupo tiene «un claro potencial de crecimiento que se ve favorecido por la flexibilización en los trámites para conseguir visados de estudios ».
La Consejería de Cultura y Turismo no se ha marcado alcanzar un número específico de estudiantes de español aunque sí espera que siga incrementándose su llegada y de ahí la puesta en marcha de las citadas medidas, detalla Mar Sancho, recordando que del año 2016 al año 2017 el crecimiento de alumnos fue del 19,5 por ciento.