Noche de ánimas en el cementerio de Zamora
Los cofrades procesionan entre las tumbas para pedir por los difuntos
Zamora cuenta con una celebración única en España que se repite cada año cuando el calendario marca el día 2 de noviembre , día de los Fieles Difuntos, cuando la cofradía de las Benditas Ánimas recorre las callejuelas del cementerio de San Atilano para rezar por las almas de quienes allí reposan.
La imagen de los cofrades entre las tumbas portando velas en la noche conforma un cortejo singular , casi fantasmagórico, que forma parte del patrimonio tradicional de los zamoranos.
Tres hermanos portan a pulso y en plano inclinado, sin andas y con la única luz de dos teas, la imagen del Cristo del Perdón , talla del siglo XVII de Bartolomé de Espinosa que recibe culto en la capilla del camposanto. Mientras, los cofrades recorren el recinto sagrado y rezan los misterios y letanías del Santo Rosario.
La comitiva discurre por un itinerario trazado mediante velas que dibujan una imaginaria cruz entre las tumbas silentes, llenas en estos días de flores, mientras el eco del rezo rompe el reverencial silencio. Fundada a principios del siglo XIX, la Cofradía de las Ánimas perdió fuerza, para ser refundada en 1960. En la actualidad, cerca de tres centenares de personas participan en la que es la única procesión que se celebra en un cementerio en la noche de Ánimas.
A esta cofradía se une en los últimos años la Hermandad Penitencial de Jesús Luz y Vida, que sale a las calles el Sábado de Pasión . La hermandad llevaba este sábado a su titular, obra del escultor Hipólito Pérez Calvo, desde la Catedral a la capilla del camposanto, donde permanece hasta el próximo 3 de noviembre, como promesa de la resurrección.
En los momentos previos a la procesión de Ánimas, la imagen es colocada en el crucero del cementerio, donde preside el inicio y final del rezo junto al Cristo del Perdón. La hermandad es representada en la procesión por su estandarte de difuntos, de color morado, que se coloca sobre los féretros de los cofrades que fallecen, cumpliendo así la premisa fundacional de las distintas cofradías de acompañar a los hermanos en su muerte. En este sentido, pervive en Zamora la costumbre de que cofrades de distintas hermandades pidan ser amortajados con las túnicas con las que han procesionado en vida.
La cofradía de las Ánimas rezará mañana a las 20:15 horas en su memoria y por el descanso eterno de todos los zamoranos.