Montserrat, condenada por matar a Carrasco: «Dios ya me ha perdonado»

La autora confesa de la muerte de Isabel Carrasco , pese a definirse como religiosa, dice no haberse arrepentido en ningún momento de lo que hizo porque «no tengo por qué pedir perdón a nadie». Aunque no descarta confesarse a la salida de la prisión, reconoce que «a mí Dios ya me tiene perdonada» e insiste en que «se haga justicia» para que su hija Triana salga ya en libertad y a ella se le reduzca la pena de 22 años que está cumpliendo. Así se recoge en la tercera y última parte en la entrevista en exclusiva realizada por La Nueva Crónica en la prisión de Mansilla de las Mulas (León) a Montserrat González y Triana Martínez , condenadas por el asesinato de la que fuera presidenta de la Diputación y del PP provincial, abatida a tiros el 12 de mayo de 2014. Montserrat considera «excesiva» su condena y entiende que tendría que salir ya a la calle por unos hechos que, según dice, no compartió «con nadie» porque «para qué, si lo iba a hacer yo», al tiempo que admite no haber pensado las consecuencias, aunque sí haber tenido miedo porque su hija pudiera suicidarse. Sin tener en cuenta al entorno de Carrasco, dice sentir lástima por la situación de la hija de la política asesinada, pero no por el crimen sino «por tener una madre así», al tiempo que asegura que no le pediría perdón porque «no se trataba —con su madre— y ella estaba encantada de la vida», añade.

Sin querer entrar a valorar lo que le ha dicho su familia sobre lo sucedido, Montserrat recalca que «tenía que hacerlo por Triana y lo hice» , y declara tener ganar de salir «para contar su maldad» a todo el mundo. Pese a encontarse en prisión, dice estar «de maravilla» porque «esa gente —en referncia a Carrasco—_no es para estar en el mundo». Aunque insiste en que confía en que Dios hará justicia, entiende que a ella ya le ha castigado al entrar en la carcel porque «esto es un castigo gordo, y más en esta cárcel y en este módulo».

Sobre la figura de Raquel Gago , insiste en que fue «una cosa casual» por la que la agente de la Policía Local «no debería estar así, y Triana igual» dado que ella fue la autora «a esa hora y coincidió» que estuvieran en la zona tanto la agente de la Policía Local en libertada provisional como Triana, con la que comparte prisión.

Por su parte, la hija dijo sentirse molesta por que la gente pueda pensar que ella y Raquel Gago son lesbianas. «Ha sido algo mediático, no es real» , dice. Denuncia también que algunas funcionarias de la prisión van «a por ellas», algo que se pregunta si corresponde a una orden y a que son votantes del PP o «no lo sé, pero lo noto». Además, Triana se pregunta por qué, al igual que Raquel, no puede esperar el recurso fuera de prisión «si se sabe que no hubo un plan», señala.