Mañueco y Egea piden unidad y fortaleza para afrontar la renovación provincial

El presidente de la Junta y del PP de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, y el secretario general del PP, Teodoro García Egea, han pedido este miércoles unidad y fortaleza para afrontar la renovación a través de los congresos provinciales y que ésta sea la base de futuro del partido para ganar las próximas elecciones nacionales, autonómicas y locales, informa Ical.

Así lo han manifestado ambos dirigentes en la clausura de la Junta Directiva Autonómica, celebrada de manera presencial con Mañueco, García Egea, el secretario autonómico, Francisco Vázquez, y los presidentes provinciales, y telemática con el resto de sus miembros, en la que se anunció que en las próximas semanas se iniciarán los contactos para poner fechas a los siete congresos por celebrar, excepto los de Ávila y Valladolid.

«La historia del Partido Popular de Castilla y León es de unidad y acuerdo. Necesitamos fortaleza y unidad» , ha remarcado Mañueco, convencido de que con esos valores el partido ha sido y es referente en la comunidad y «siempre gana». Junto a ello, aboga por sumar el centro derecha, liderar un proyecto, ser útiles y hacer una buena gestión.

No obstante, avisa de que los congresos son un instrumento y lo que se trata es de ganar elecciones, donde abogó también por aprovechar el resultado del 4 de mayo, convencido de que «la gente se ha cansado de Pedro Sánchez y mira al Partido Popular porque quiere futuro».

« Un Partido Popular fuerte y unido es la pesadilla de Sánchez» , ha añadido García Egea, que afirma que «ya vale» del primer Gobierno de coalición y asegura que solo hay dos alternativas: la de Pablo Casado y la de Pedro Sánchez, para indicar que se percibe en la calle «la ola de cambio» hacia su partido.

No obstante, a mbos insisten en que «hay que trabajar» de manera que el presidente autonómico aliente a «apretar» cuando se cumple el ecuador de la legislatura y el secretario nacional afirma que «las cosas van bien» para la reunificación del centro derecha y destaca que su división da «oxígeno al sanchismo».