En manos de la Justicia

La personación de la Junta en la investigación que realiza el Juzgado nº2 de Valladolid sobre el edificio al que ya todos conocemos como «La Perla Negra» da un giro importante al caso, porque tácitamente el Gobierno Regional reconoce que ha habido irregularidades en una parte de la adjudicación, la referida al mobiliario, cuyo procedimiento pudiera haber sido constitutivo de delito. De alguna manera, esta posición de la Junta reconoce también que pudiera haber habido responsabilidad «in vigilando» a la hora de asegurar la correcta realización de adjudicaciones sobre el mismo.

El hecho de que el asunto lo investigue la justicia, garantiza que de forma inexorable se va a ir al fondo del caso y se depurarán las correspondientes responsabilidades penales, si es que las hubiera. Lo cierto es que el caso eclosiona en un momento particularmente complejo, a las puertas de unas elecciones , cuando la lucha entre los partidos está más viva y cuando cualquier elemento excita la vía de la sospecha. Por eso tengo la impresión de que no tiene demasiado fundamento en este momento la investigación del caso en las Cortes de Castilla y León, porque quienes están actuando son los tribunales de justicia y son sus investigaciones las que tienen plena validez. La vía política, respetable, legítima y necesaria en otro momento, no va a aportar ahora nada esclarecedor y sí en todo caso puede dar pie a una ceremonia de la oportunidad, o del oportunismo, para tratar de obtener los correspondientes réditos electorales.

Hay que dejar trabajar a la justicia, porque aunque lenta en su tarea suele ser inexorable. Los resultados de la investigación y, si procede, la causa que pueda derivarse, son la plena garantía de que funciona el estado de derecho y que si ha habido irregularidades no quedarán impunes y se depurarán las responsabilidad de quienes pudieran haber vulnerado las leyes y de resultas, perjudicado a todos los ciudadanos.