Luis Jaramillo - Punto de vista
Fuera de lugar
«...Volver otra vez al «León solo» es algo que no acierto a entender muy bien. Diez no habló de este asunto en la campaña, ni lo ha planteado abiertamente en su partido para que sea discutido»
Que a estas alturas volvamos al mapa territorial de la Comunidad es algo que cuesta mucho entender. Que se trate de reabrir el debate por actores que llevan años en la vida política y no se han caracterizado precisamente por ser beligerantes con este asunto es algo que llama la atención. Está en su derecho el alcalde de León, José Antonio Diez, en expresar en voz alta sus opiniones sobre Castilla y León y en reclamar un mejor trato para su tierra, pero volver otra vez al «León solo» es algo que no acierto a entender muy bien. Diez no habló de este asunto en la campaña, ni lo ha planteado abiertamente en su partido para que sea discutido. Enredar otra vez con estos temas no aporta nada al debate político y sí excita los ánimos de quienes aprovechan lo más mínimo para abrir la caja de Pandora de los agravios.
Castilla y León es una comunidad compleja, si se quiere artificial, con un fuerte sentimiento provincializado y eso son elementos que hay que tener en cuenta. Obliga a un equilibrio que se lleva manteniendo, con sus aciertos y sus errores, muchos años y que en conjunto ha sido positivo para nuestra tierra. ¿Significa que todo está hecho y ya hay que conformarse? Claro que no, pero lo que no se puede hacer es estar alimentando permanentemente el discurso de la provisionalidad y el agravio entre las provincias porque es un asunto cerrado que solo incita al victimismo y a perder el tiempo en lo que no es necesario.
España vive momentos de gran incertidumbre. Se trata de volar interesadamente la Transición, se cuestiona el título VIII de la Constitución y se quiere abrir el melón de la integridad nacional. Puede que en los territorios que utilizan su nacionalismo para la ruptura les pudiera dar réditos electorales y a la larga generar una gran frustración, pero en el resto de España éste es un debate estéril que no aporta nada y que solo contribuiría a fomentar la división y el discurso de los agravios comparativos.
Lo responsable hoy y siempre es sumar, buscar lo que une que es mucho más de lo que ven quienes alientan estos mensajes y centrarnos en ser mas competitivos, más emprendedores, más ambiciosos e imaginativos y unir fuerzas para afrontar la recesión que según muchos indicadores está a las puertas y entrando. Lo demás es perder irresponsablemente el tiempo.