ELECCIONES CASTILLA Y LEÓN
Los líderes nacionales de ayer y hoy de PP y PSOE, en apoyo a sus «aliados»
Sánchez advierte de que son necesarios más votos que en 2019 y Zapatero apela al «cambio necesario», mientras que Aznar y Casado reclaman un respaldo «contundente» porque «no son tiempos para el menudeo y el oportunismo»
Estos son los casos en los que puedes justificar no asistir a una mesa electoral
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Menos mal que Castilla y León es una tierra ancha, larga y alta (muchos creen que todo evoca a Machado y se olvidan de Urbión, Gredos o la Montaña Palentina) porque si no, no habría espacio suficiente para acoger a tanto dirigente nacional y autonómico. Tal es así que los contemporáneos no han sido suficientes para este primer fin de semana electoral y ha habido que recurrir a los que en otros tiempos, no muy lejanos, estuvieron al frente de la política nacional y tuvieron su predicamento en estos lares.
Pedro Sánchez y José Luis Rodríguez Zapatero , de un lado; Pablo Casado y José María Aznar , de otro, han coincidido este sábado en la geografía autonómica para apoyar a los dos candidatos a la Presidencia de la Junta, Luis Tudanca y Alfonso Fernández Mañueco. El hoy y el ayer juntos con el añadido de que los segundos de cada caso son un referente en una Castilla y León que les vio nacer como políticos antes de convertirse en presidentes del Gobierno: Zapatero, como leonés y activo dirigente de la federación socialista leonesa; Aznar , como abulense de padrón (realmente es madrileño) y como primer presidente de la Junta del PP . Así que los cuatro desembarcaron en la Comunidad con mensajes nacionales (un clásico en esta campaña) pero con el mandato de empujar a sus candidatos y concentrar el voto a un lado y otro del espectro ideológico en unas elecciones tan inéditas como impredecibles en las que todos los recursos son pocos. En lo que coincidieron fue en levantar pasiones entre los suyos , los convencidos, y llenaron allí donde se desarrollaron los actos públicos, como ocurrió en la capital zamorana, con el PSOE, y en la vallisoletana, con el PP.
Pedro Sánchez ha sido el mitinero más madrugador y ha reunido a más de 500 personas en el Teatro Ramos Carrión de la Perla del Duero. A ellos, desde un escenario rojo, rojo ha pedido que el 13 de febrero «nadie se quede en casa» pero, sobre todo, ha advertido de que habrá muchas papeletas, pero «solo una garantiza el cambio y la esperanza que representa el candidato socialista a la Junta, Luis Tudanca» . Ha recordado, además, que aunque éste ya ganó en 2019, hoy necesita de más votos para hacerlo «imparable» y que sea el próximo presidente de la Junta para convertirse en un «aliado» en la Comunidad.
Casi a la misma hora y en la misma provincia -en Benavente- el aspirante popular Alfonso Fernández Mañueco , ha hecho también un llamamiento a «concentrar el voto del espectro del centro-derecha» en su persona para conseguir «la reunificación en torno al proyecto del PP» y, con ello, revalidar la Presidencia con un gobierno «en solitario». Un mandato en el que también ha insistido el líder nacional Pablo Casado que ha pasadi la mañana de ‘tournée’ por la provincia de Segovia. Primero la estación de esquí de Navacerrada, luego La Granja y, para terminar, la capital del Acueducto. Allí ha reclamado la «confianza y el voto» para su candidato, Alfonso Fernández Mañueco. « Los castellanos y leoneses están muy bien representados por el PP , pero con demandas que no se pueden cumplir porque gobierna Sánchez», incidió. La tarde arrancó con el expresidente del gobierno, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero , que se ha desplazado hasta la localidad leonesa de Fabero para defender que la etapa de la minería «se terminó» y ahora toca «construir una nueva» que, a su juicio, pasa por la «descentralización» y por el cambio «necesario» que promueve Tudanca.
En la capital vallisoletana el expresidente del Gobierno y de la Junta, José María Aznar , ha paseado por el centro de la ciudad acompañado por Mañueco y otros dirigentes ante el asombro de los viandantes que le pararon una y otra vez para hacerse selfies. El camino hasta la Cúpula del Milenio, donde se ha celebrado un acto que ha congregado a más de 500 personas, fue un continuo detenerse para atender a fieles simpatizantes que le recordaron su pasado como político. Así que no era de extrañar que en el mitin también levantase pasiones entre los asistentes sobre todo después de señalar que « aquí me siento como en casa», «soy castellano y leonés por decisión y, sobre todo «aquí empezó todo». Y es que Aznar ha articulado su intervención en que « Castilla y León es el camino, tiene que ir por delante» y el PP «tiene que ser una referencia sólida en la que confiar». «No son tiempos para el menudeo, la ventaja táctica y el oportunismo», ha clamado, ni para «escuchar el ruido que llama a la fragmentación o a pescar pequeñas ventajas», sino para lograr «un respaldo claro y contundente».
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