Ismael Álvarez, condenado por acoso en el caso Nevenka: «No me arrepiento de nada»
El exalcalde de Ponferrada asegura que «no voy a pedirle perdón por algo que no hice»
El exalcalde de Ponferrada, Ismael Álvarez, condenado hace veinte años por acoso sexual a la que fuera concejala del Ayuntamiento, Nevenka Fernández , ha asegurado este jueves que «no me tengo que arrepentir de nada» ni «pedirle perdón por algo que no hice». En sus primeras declaraciones tras la emisión del documental «Nevenka» en Netflix, Álvarez ha afirmado en Televisión Castilla y León que su sentencia «fue injusta» al tiempo que ha criticado «el relato de una persona sin pruebas de ningún tipo».
Tras recordar que hubo un voto particular que le absolvía «y donde está desmenuzado por qué soy inocente», ha denunciado que los jueces fallaron en su contra «porque no admitieron muchas pruebas para aclarar las mentiras» de Nevenka Fernández en lo que ha calificado como «un atropello hacia mi persona» .
Condenado finalmente por el Supremo a una multa de algo más de 2.000 euros por acoso sexual, sí ha reconocido que «si hoy en día me hubiera tocado un magistrado que no quisiera estudiar bien el caso pues podría estar en la cárcel probablemente». En todo caso, también ha asegurado que comprende y apoya «la lucha de las mujeres» y « condeno sin fisuras cualquier tipo de acoso y de machismo y así lo he defendido a lo largo de toda mi vida».
Sobre la relación con la exedil, ha dicho que fue «consentida en todo momento» para concluir que «me porté muy bien con ella» e insistir en que tiene «documentos en los que se demuestra mi verdad».
Por último, ha asegurado que «nadie en Ponferrada la echó de allí» – Nevenka se marchó al Reino Unido tras la sentencia– y que «si se fue es porque ella quiso y volverá o no cuando le apetezca».