Hallan muerta a una pareja de ancianos sin signos de violencia

Una mujer de 79 años y su marido, de 74, han aparecido muertos en su vivienda de la capital burgalesa por lo que parece una intoxicación por monóxido de carbono, aunque los investigadores están a la espera del resultado de la autopsia para cerrar el caso.

Fue una vecina de la Barriada de la Inmaculada, de Burgos capital, donde las víctimas vivían desde hace décadas, la que alertó a la Policía Nacional porque llevaba varios días sin ver a sus dos vecinos y temía que les hubiera podido pasar algo, como finalmente fue.

En el salón de la vivienda se encontraban a la mujer en un sofá y al hombre en un sofá cama. Ambos parecían dormidos, no presentaban signos de violencia y estaban tapados con sendas mantas. La primera impresión de los investigadores es que el fallecimiento pudo producirse hace varios días. Esto precisamente ha podido provocar que no se hayan hallado rastros de monóxido en las muestras tomadas en el lugar que arrojaron niveles normales.

El calentador de agua con gas butano tenía la llave de paso cerrada y en la cocina había una cocina «económica» de carbón que estaba apagada. También había un cubo metálico con cenizas. Una mala combustión pudo ser la causa de la emisión del gas tóxico.

A ambos, que vivían solos desde hace años en el domicilio y no tenían hijos, se les practicará la autopsia para poder esclarecer lo ocurrido.