Guillermo Garabito - La sombra de mis pasos
Desmontando España
Porque como Diez Díaz no es nadie en el PSOE y gobierna con lo puesto ha decidido hacerse un nombre a base de enfangar en León, que es la primera lección del «Manual de resistencia», palabra de Pedro Sánchez

Por dónde cortamos León, para quién el páramo y las peñas, los embalses y el Bernesga. El Bierzo inmóvil, con su estoico carácter, en tierra de nadie. Irreductibles bercianos. Por dónde cortamos la historia, hasta dónde nos remontamos… Al alcalde de León que se lo queden los leonesistas y a Luis Fuentes también, que ya a bastante iluminado tocamos por cabeza.
El alcalde creyendo que el problemas son los vecinos. Y somos los vecinos -y los oriundos- los que sabemos que el problema es el alcalde. Porque como Diez Díaz no es nadie en el PSOE y gobierna con lo puesto ha decidido hacerse un nombre a base de enfangar en León, que es la primera lección del «Manual de resistencia», palabra de Pedro Sánchez. Reavivar viejas discordias: Castilla nos roba. León solo. Y todo eso desemboca siempre en una única cosa: Yo.
«La España que quieres». Esto pasa por no creer al PSOE literalmente, lo mismo que antes a VOX. Hoy la quiero de 17 autonomías y mañana de 3 naciones, 5 autonomías y dos reinos de taifas, por favor.
Como toda revolución requiere de un manifiesto ahí salieron los intelectuales leonesistas, porque desde que a Bardem le presentan como intelectual se usa la palabra con cualquiera. Todo levantamiento requiere sus intelectuales, Franco tenía los suyos y el alcalde de León a doscientos firmando un manifiesto de los cuales sólo conozco a cinco o seis. El resto, supongo, como en todos los manifiestos, están por hacer currículum y bulto.
El mundo va en una dirección mientras el Partido Socialista de Pedro Sánchez tiende a los nacionalismos, al regionalismo y a los enanos morales. Y Tudanca callado. Si le van a entrar los remilgos a estas alturas mejor sería que fuera sacando el dedo para nombrar un sucesor. Porque la culpa de toda esta división insolidaria la tiene Pedro Sánchez y sus ansias presidenciales. Y el alcalde de León, que quiere mimos como Iceta. Y Óscar Puente y De Santiago-Juárez, el PSOE y el PP, por poner a dos soberbios en Valladolid con ansias de titulares.
Qué fácil le están dejando la presidencia a Mañueco. Mañueco, que se las ponen como a Felipe VI, sólo debe demostrar serenidad y que Castilla y León se mantiene firme y solidaria frente a esta nueva hornada de populistas.
Mientras, la autonomía se derrumba y tú y yo nos enamoramos.