El Gobierno presenta a los sindicatos su plan para reactivar las cuencas mineras

Los planes del Gobierno de España para reactivar las cuencas mineras productoras de carbón y para garantizar la que se viene denominando «transición justa», contemplan un programa de restauración de los espacios naturales dañados por las minas; impulsar proyectos de Energías Renovables y Eficiencia Energética; y firmar «contratos de transición justa» para los territorios afectados por el cierre de las minas y las centrales térmicas de carbón, con el objetivo de fijar empleo a medio y largo plazo en esas comarcas. Esa novedosa modalidad de contratación contaría con la participación de las diferentes administraciones y actores sociales, según indica el Ministerio para la Transición Ecológica, en uno de los últimos borradores entregados a los sindicatos, con propuestas que se quieren desarrollar, de aquí al año 2021.

Son las líneas básicas del documento que la ministra para la Transición Ecológica presentará a los sindicatos, en una reunión prevista para esta mañana, en Madrid. En su propuesta de medidas excepcionales, bautizada como «Plan de Acción Urgente», el Ejecutivo recuerda que, atendiendo a las decisiones europeas fechadas en 2010, las minas de carbón no competitivas deben cerrar el 31 de diciembre de este año. Con esa premisa, se reconoce que esa clausura puede provocar repercusión en zonas donde «ya existe un elevado índice de desempleo y limitadas oportunidades de reinserción laboral para unos trabajadores que vienen realizando tareas muy específicas, propias de un sector en crisis, en unos puestos de trabajo que requieren de unas características físicas singulares y gran desgaste físico, y que se encuentran sin posibilidades de un empleo alternativo».

En paralelo, el documento también contempla bajas incentivadas y prejubilacione s, para compensar a los mineros que pierdan su puesto de trabajo, y ante las evidentes dificultades de encontrar un empleo alternativo. Las bajas indemnizadas se ofrecerán a los trabajadores que quieran permanecer en las labores de restauración de las explotaciones. De esta forma, dice el Ministerio, se busca «evitar una salida traumática». La indemnización establece una cantidad fija de diez mil euros y una cantidad variable que se calculará individualmente y que corresponderá a treinta y cinco días de salario por año trabajado, con un límite de treinta mensualidades. Aquellos mineros afectados por la silicosis podrían percibir 26.000 euros más.

En cuánto a las prejubilaciones, se podrán acoger a esta medida los trabajadores de edad avanzada, que tengan contrato indefinido y cincuenta o más años de edad, con, por lo menos, tres años de antigüedad en la empresa en la que causen baja y nueve cotizando en el Régimen Especial de la Minería del Carbón de la Seguridad Social. En todo caso, el cálculo de esas cantidades dependerá de otras variables previstas en el documento.