Luis Jaramillo - Punto de vista
Diálogo abierto
«La Consejería de Fomento está dando la batalla para encontrar una solución que corresponde al Ministerio y para ello, Juan Carlos Suárez Quiñones está dispuesto a colaborar...»
El viernes el Consejo de Ministros dará luz verde al anteproyecto de Presupuestos Generales para 2018, en los que la Junta espera partidas para culminar la alta velocidad y el impulso definitivo a las autovías en marcha en Castilla y León. Mientras tanto, en la Consejería de Fomento trabajan con el Ministerio en un doble frente importante para nuestra tierra: que cuando acabe la concesión de la AP1 el próximo año quede como autovía libre de peaje y el desvío a las autopistas del tráfico de alto tonelaje por la N 1 y la N-VI.
Es antigua la reclamación de acabar con el peaje en la AP1 en Burgos, que se mantiene porque el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero renovó la concesión a Europistas en 2005 hasta noviembre de 2018. En esa fecha la autopista revierte al Estado y no parece que vaya a ser la primera autopista de pago que gestione directamente el Ministerio, y mucho menos a unos meses vista de las elecciones autonómicas de junio de 2019.
Por lo que respecta al desvío del tráfico pesado de las carreteras nacionales, ayer ABC informaba que hay 7 nacionales con autopista alternativa en la Comunidad, aunque lo lógico es priorizar en aquellos casos realmente urgentes y no cabe duda que el tráfico pesado por la N I y la VI es un problema que se ha acentuado con graves accidentes este año.
La Consejería de Fomento está dando la batalla para encontrar una solución que corresponde al Ministerio y para ello, Juan Carlos Suárez Quiñones está dispuesto a colaborar siempre que no implique comprometer la atención a la red de carreteras de la Comunidad. Parece que en este asunto, el diálogo con el Gobierno de España es fluido y ojalá que sea así después de tantos choques como ha habido en los últimos tiempos.