Sucesos
Descubren en unas obras 237 monedas acuñadas entre los siglos XVII y XVIII y se quedan con el botín
Aparecieron dentro de una vasija de barro escondida entre los muros de una casa en ruinas
Tres personas están siendo investigadas por «apropiación indebida»
![Las monedas son de oro y fueron acuñadas entre 1773 y 1882](https://s3.abcstatics.com/media/espana/2016/05/05/monedas--620x349.jpg)
Las monedas aparecidas dentro de una vasija de barro escondida entre los muros de una casa en ruinas, situada en Valoria la Buena (Valladolid) y halladas tras su derribo, son de oro, fueron acuñadas entre 1773 y 1882 y el valor de cada una de ellas podría aproximarse a los mil euros.
Expertos del Servicio Territorial de Cultura de la Junta de Castilla y León han determinado la autenticidad de las mismas, algo más de doscientas, pertenecientes a los reinados de Carlos III, Carlos IV, Fernando VII, Isabel II y Alfonso XII , han informado hoy fuentes de la investigación a través de una nota informativa.
El Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Civil analizan el hallazgo y la posible existencia de una «apropiación indebida» por parte de dos obreros a los que la familia propietaria del inmueble encargó el derribo de la casa, sobre la que pesaba un expediente de declaración de ruina por parte de la Diputación de Valladolid.
La investigación comenzó a mediados del pasado abril con la denuncia ante la Policía Nacional, en una comisaria de Valladolid, del hallazgo de las monedas por parte del propietario del inmueble, a quien uno de los obreros había dado cuenta de lo acontecido y explicado que se las había repartido con su compañero de trabajo.
En una primera fase, la Policía recuperó 199 unidades que entregó el operario arrepentido y más tarde localizó 37 en manos de su compañero en las tareas de desescombro.
Una tercera persona implicada
La investigación apunta también a la existencia de una tercera persona que habría ayudado a vender en el mercado ilegal algunas de las monedas de oro.
Fuentes del sector numismático han explicado a Efe que si las fueron encontradas en una de las paredes de la casa, la propiedad correspondería a los dueños del inmueble, aunque tendrán que dar una compensación, aproximadamente del cuarenta por ciento del valor, a quienes las hayan encontrado.
Diferente hubiera sido si se hubieran encontrado en el subsuelo, ya que pasarían a Patrimonio después de un análisis arqueológico y la compensación sería proporcionalmente menor