Derroche de talento joven en La Casa Grande de La Mudarra (Valladolid) para celebrar su décimo aniversario

Emocionante y espectacular el concierto con el que la Fundación Godofredo Garabito y Gregorio celebró su décimo aniversario de actividades culturales. Dos jóvenes talentos de la música clásica, dos pianos y un público entregado que completó el aforo permitido este verano en el jardín romántico de La Casa Grande de La Mudarra (Valladolid) . Guillermo Hernández Barrocal, vallisoletano de 13 años, y Cristina Sanz, madrileña de 22, impresionaron a los asistentes con un variado concierto a dos pianos celebrado mientras caía la noche sobre los Montes Torozos. La velada incluyó el concierto a dos pianos de Schumann pero también piezas de otros compositores, incluso una pieza compuesta por el propio Guillermo Hernández que destacó por su delicadeza y madurez.

Varios minutos de aplausos confirmaron el éxito de una noche especial que volvió a convertir La Casa Grande en uno de los más interesantes polos culturales de la provincia de Valladolid.

Guillermo Hernández Barrocal, niño prodigio de la música española, colecciona conciertos y premios internacionales. Cristina Sanz también atesora numerosos reconocimientos y juntos formaron una pareja que destacó por su interpretación cuidada y emocional de cada una de las piezas. Este concierto ha sido uno de los actos principales de un verano cargado de actividades en La Casa Grande, sede de la Fundación Godofredo Garabito y Gregorio.