Ignacio Miranda - Por mi vereda
Depredadores y psicópatas
En toda comunidad hay un cinco por ciento de individuos perversos y crueles, en el sentido de disfrutar haciendo el mal
Cuando aún no hemos salido de nuestro asombro ante el escuálido censo de afiliados del PP que, por estar al corriente de pago y haberse inscrito, van a votar en las primarias, pues apenas suman el siete por ciento, ahora nos encontramos a una abogada vallisoletana que cifra en un porcentaje similar el número de personas tóxicas, como las sustancias y los activos, que viven en nuestra sociedad. Y ojo al dato porque éste sí es para preocuparse. Según Paz Velasco, criminóloga que trabaja en Barcelona, en toda comunidad hay un cinco por ciento de individuos perversos y crueles, en el sentido de disfrutar haciendo el mal, al que se añade otro uno por ciento de psicópatas, considerados como criminales latentes que llevan una vida normal e integrada en su entorno.
De este último perfil, que en España sumaría casi medio millón de sujetos, llama poderosamente la atención su carácter depredador y su presencia en altos puestos directivos. «Seguramente, nunca cometerán un homicidio o un asesinato, pero sus conductas pueden destrozar familias, economías, organizaciones e incluso sociedades», explica la experta, quien acaba de publicar un libro que aborda la criminología como ciencia. Así, ajenos a toda regla ética, suelen plantearse la vida –laboral y de pareja– como una partida de ajedrez, en la cual utilizan a las personas, acosan a las víctimas y persuaden a otros para recabar su ayuda con ese fin.
La letrada penalista, que ha repasado nuestra crónica negra desde hombre lobo de Allariz al Sacamantecas de Almería, pasando por Jarabo, cree que el ser humano es agresivo por naturaleza pero violento por cultura. La educación influye. Por eso, resalta la importancia de prevenir este tipo de comportamientos de niños y adolescentes desde las aulas, porque de no ser atajadas por el binomio escuela-padres desembocará en conductas antisociales, en formas de delincuencia. Una tarea nada fácil.