El cuerpo de Esther López presenta signos de violencia compatibles con «traumatismos» y fue trasladado

A la espera aún de la conclusión definitiva de la autopsia, el primer análisis forense del cuerpo de Esther López, la joven hallada muerta el pasado sábado 5 de febrero en el municipio vallisoletano de Traspinedo tras 23 días desaparecida, sí presenta signos de violencia y pudo ser trasladada al lugar donde fue localizada las horas previas. Según han revelado a 'El Norte de Castilla' fuentes de la investigación, el primer estudio sitúa su muerte en torno al día de su desaparición, la madrugada del 13 de enero y el cuerpo presenta, según los primeros indicios, signos de violencia compatibles con «traumatismos« sufridos antes de su fallecimiento.

Previsiblemente la autopsia se prolongará un día más, hasta este martes, con el fin de confirmar con certeza la causa última de la muerte de Esther López . Lo que sí se ha podido deducir de este primer análisis es que e l cuerpo de la joven pudo ser trasladado al lugar donde fue encontrado las horas previas a su localización , en la mañana del sábado, por un «paseante». Es una de las hipótesis que siempre se han barajado, ya que su cuerpo se halló «dentro del radio» de las batidas y la operación de búsqueda. Asimismo, el cádaver fue encontrado «en superficie» y «a la vista». Ya el sábado el coronel Miguel Recio admitió que era «muy poco probable, aunque no imposible» que no se hubiese detectado a la difunta de haber permanecido allí desde un inicio.

Fuentes de la investigación inciden en este sentido que el escenario donde fue encontrada, una cuneta situado a escsos metros de la carretera principal que une la N-122 con el casco urbano del municipio, no parece el del fallecimiento y señalan, según revela el citado diario, que con «una alta probabilidad» pudo ser «conservado» en otro lugar, trasladado y dejado allí.

Ayer domingo, en su perfil de Twitter, la delegada del Gobierno en materia de Violencia de Género, Victoria Rosell, daba por seguro la «muerte violenta» de la joven vallisoletana. Asimismo, Pedro Sánchez aseguraba, durante un acto de campaña en León, que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado «trabajan para que este delito no quede impune y para que quienes lo hayan perpetrado acaben donde tienen que acabar». Esta misma mañana el presidente de la Diputación de Valladolid y presidente provincial del Partido Popular, Conrado Íscar , ha pedido prudencia y evitar la «precipitación» a la hora de sacar conclusiones: «Hay que dejar trabajar a las Fuerzas de Seguridad del Estado para que aclaren cuál ha sido la causa de la muerte de Esther», ha insistido.

En esta línea se manifestaba también en un comunicado el padre de la joven fallecida, Miguel López, quien consideraba que es tiempo de que los investigadores y la Justicia «hagan su trabajo» y de que él se reúna con su familia para despedirse de Esther «en la intimidad».