Un concejal de Valladolid llama «imbéciles» a los grafiteros que pintaron en un túnel recién restaurado

Ni ocho horas tardó el túnel de San Isidro de Valladolid en volver a tener grafitis estampados en sus paredes después de que el Ayuntamiento se hubiese esmerado en limpiarlo y restaurarlo de las pintadas anteriores. Y, por ello, el concejal de Seguridad Ciudadana, Antonio Otero, no ha dudado en calificar de «imbéciles» a los responsables de este acto vandálico.

En una entrevista en la cadena Cope, el edil ha asegurado este lunes sentirse «decepcionado» más que enfadado, aunque es cierto que «da rabia pensar que un paso que había quedado tan bien se vea a las ocho horas destrozado por alguien que se considere con el derecho de estropear una cosa que es de todos ». Pero, además, sobre la pintura recién colocada han puesto algo que «no tiene ningún sentido, son ganas de estropar algo que es de todos».

La inauguración se produjo el pasado viernes y el sábado a primera hora de la mañana el espacio ya volvía a tener grafitis. Y ahora, después de haber empleado medios y presupuesto en restaurar y pintar el túnel, «habrá que borrarlo» y pintar de nuevo el paso de San Isidro «con el grave riesgo de que esta gente vuelva a pintarlo», ha manifestado el edil.

«Son imbeciles, no tienen otro calificativo» , ha asegurado convencido José Antonio Otero, que insistió en que el Ayuntamiento devolverá al estado del pasado viernes el túnel no sin antes recordar a los autores que en esta nueva restutación se volverá a invetir «un montón de dinero». Sólo en 2018 el sevicio de limpieza de la ciudad gastó 300.000 euros en quitar grafitis y restaurar «la normalidad en los edificios», ha explicado. «Seis operarios del Ayuntamiento se dedican sólo a eso», ha subrayado.

Y ¿será fácil dar con los responsables? «No», ha contestado el concejal porque «hay que pillarles en el momento». De hecho, en la noche del viernes al sábado, «en previsión de que pudiera pasar esto», varias patrullas de policía pasaron por allí en varias ocasiones. «Pero parece que no necesitan ás de 15 minutos» , ha explicado, por lo que el Ayuntamiento estudia ya la posibilidad de colocar cámaras de seguridad en algunos lugares para evitar las pintadas de los grafiteros.