Castilla y León pregunta a Montoro si quiere que no se atiendan a los enfermos

La vicepresidenta y portavoz de la Junta de Castilla y León, Rosa Valdeón, aseguró este jueves que no habrá ningún recorte en los servicios esenciales de la Comunidad, que absorben el 80 por ciento del presupuesto autonómico, por entender que el ajuste ya se ha hecho y se dirigió así al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro: «Qué diga dónde hay que quitar, es imposible reducir nada, no tenemos más margen». Valdeón explicó, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, que recibieron ayer por la tarde el requerimiento del Ministerio de Hacienda para que en el plazo de quince días aprueben una orden de no disponibilidad de gasto y añadió que se estudiará, pero arremetió contra un modelo «injusto e insuficiente» de financiación autonómica y un reparto «irracional» de objetivo de déficit entre las administraciones públicas, informa Ical.

Tras recalcar que no están de acuerdo con el mandato «imposible» del ministro de Hacienda como medida contra el desvío de déficit de 1,33 sobre el objetivo de 0,7 en 2015, la vicepresidenta defendió que Castilla y León «no ha malgastado fondos» y preguntó a Montoro si quiere que no se atiendan a los enfermos, porque la Comunidad «no lo va a hacer».

Valdeón, que reclamó «sensibilidad» al ministro, recalcó que el ajuste está hecho, que no pueden recortar más en lo que son servicios prioritarios y básicos para los ciudadanos y estimó que «es más fácil recortar de otras cosas». «Castilla y León no va a negar ni renunciar a más sanidad, educación y servicios sociales, son prioritarias», afirmó.

El problema para la Junta, como indicó Valdeón, parte de un modelo de financiación autonómica «insuficiente e injusto» que no cubre los servicios esenciales y de un reparto de déficit no sólo «injusto», sino «irracional». Con otra distribución, la vicepresidenta afirmó que la Comunidad sí hubiera cumplido el objetivo, como en el caso de que hubiera sido de un 1,4 por ciento, «más racional» y reclamado por la Junta.

Por último, otorgó validez a los presupuestos para 2016, en los que figura un déficit del 0,3 por ciento, rechazó que puedan estar sometidos a una «unilateralidad» y subrayó la intención de cumplir los mandatos del mismo.