Castilla y León, un plató de película para José Luis Cuerda
Las tierras altas de Soria, la comarca salmantina de Sierra de Francia y el municipio de Pedraza, en Segovia, sirvieron de escenario para algunos de los mejores guiones de la filmografía del cineasta manchego fallecido ayer a los 72 años
![Escena del film «Así el cielo como en la tierra«, rodada en Pedraza (Segovia)](https://s1.abcstatics.com/media/espana/2020/02/05/cuerda-U301101579224qcC--1248x698@abc.jpg)
Figura imprescindible de la historia del cine español, el recién fallecido cineasta José Luis Cuerda supo retratar como pocos la España de la posguerra desde el humor absurdo y surrealista y fueron múltiples los escenarios de su geografía que sirvieron de plató a sus películas, casi una veintena. Madrid, su Castilla-La Mancha natal -era natural de Albacete-, Barcelona y Galicia le sirvieron fundamentalmente como escenarios de grabación, pero también Castilla y León está muy presente en sus películas, sobre todo la comarca salmantina de de Sierra de Francia, las tierras altas de Soria y Segovia, principalmente el municipio de Pedraza.
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Precisamente la plaza de este último municipio se convirtió en el «cielo» imaginario del director de cine José Luis Cuerda en «Así en el cielo como en la tierra» (1995) , una de sus películas más representativas y también del cine contemporáneo español. El cineasta manchego rodó el film casi de forma íntegra en este espacio, donde los vecinos del pueblo tuvieron el privilegio de convivir con actores consagrados como Fernando Fernán Gómez, Francisco Rabal, Jesús Bonilla, Gabino Diego, Chus Lampreabe o Enrique San Francisco, entre otros. Tanto IMDB como la Wikipedia señalan Peñafiel (Valladolid) como parte del escenario de rodaje.
![José Luis Cuerda durante el rodaje de «La marrana»](https://s3.abcstatics.com/media/espana/2020/02/05/marrana-keUD--510x349@abc.jpg)
Lo mismo les ocurriría años antes a los vecinos del pueblo serrano de La Alberca con Alfredo Landa y Antonio Resines, protagonistas de «La Marrana» (1992) , una comedia ambientada en el siglo XV en la que un excautivo regresa a su tierra con la ilusión de comer su manjar preferido: el cerdo. ¿Y qué mejor escenario que un pueblo en el que el Cerdo de San Antón vaga libremente por sus calles? «La Marrana» recibió varios premios Goya, entre ellos el de Landa como mejor actor.
![Cuerda, con los actores de «La marrana»](https://s3.abcstatics.com/media/espana/2020/02/05/marrana3-keUD--510x349@abc.jpg)
Pero no fueron estos los únicos paisajes y pueblos castellano y leoneses que sirvieron de escenarios al cienasta fallecido ayer. Otra de sus películas más laudeadas en los Goya, «El bosque animado» (1987) -obtuvo hasta cinco premios de un total de ocho nominaciones- tuvo como escenario la localidad salmantina del Puerto de Béjar. Hasta allí se trasladó parte del equipo para rodar algunas escenas ya que la mayor parte del rodaje tuvo lugar en el municipio coruñés de Sobrado.
![Escena de «El bosque animado», rodada en parte en el Puerto de Béjar](https://s2.abcstatics.com/media/espana/2020/02/05/bosque-animado-keUD--510x349@abc.jpg)
Sin embargo, pese a ser la adaptación de la novela homónima de Wenceslao Fernández Flórez una de sus primeros grandes largometrajes no era la primera vez que hacía una incursión en Castilla y León como escenario de rodaje. Años antes cuando José Luis Cuerda hacía cine principalmente para televisión se trasladó hasta la tierras altas de Soria para rodar el filme «Total» (1983) . Una película de apenas una hora de duración en la que ya marcaba las pautas del que iba a ser su cine: humor, sátira y lenguaje surrealista para retratar la España de posguerra. Oncala, Yanguas y San Pedro Manrique fueron algunos de los municipios que acogieron el rodaje de esta película reunió de nuevo a excelentes actores como Manuel Alexandre o Chus Lampreave.
El cineasta fue homenajeado en la 58 edición de la Seminci en la que recogía un galardón por haber sido elegida «Amanece que no es poco» la Mejor Película Española de los últimos 60 años.