José Gabriel Antuñano - El Callejón del gato
C's en Ávila
«El problema de Rivera en esta región es la falta de estructura de partido y de liderazgo»
Ávila desde hace décadas es una sangría para el PSCL y en las pasadas autonómicas dejó de ser el granero de los populares por la ausencia del Gobierno regional en esta como en otras provincias menores en población de la Comunidad. El vacío lo ocupó Ciudadanos y el domingo, aprovechando la cuna de Adolfo Suárez, Rivera lanzó la precampaña en Castilla y León. Como es habitual, habló con un lenguaje claro y sencillo, que refresca los discursos que amarillean ya sin vida o harto de tópicos de populares y socialistas, y afrontó preocupaciones de la sociedad, sin adentrase en los galimatías cavernarios y abstrusos de los podemistas de Iglesias.
Diáfano en las propuestas, no teme concretar. Habló de la necesidad de reconvertir las obsoletas cuencas mineras, con fecha de caducidad por la UE en contra de los empeños voluntaristas de la política regional, y de reindustrializarlas; planteó suprimir las diputaciones y fusionar servicios que no pueblos en Castilla y León, con argumentos aplastantes, porque esta medida supone ahorro y es un modo de regeneración pública y de política de transparencia; adelantó el apoyo de su formación a los presupuestos, porque sabe que en Castilla y León es mal recibido el obstruccionismo político, que el PP rentabilizaría. Ofreció un pacto de Estado contra el seccionismo, con la seguridad que ni Rajoy ni el ambiguo Sánchez firmarán, a sabiendas que ahí cuenta con un caladero de votos a su izquierda. El problema de Rivera en esta región es la falta de estructura de partido y de liderazgo. El clamoroso silencio de Fuentes ante el independentismo catalán, emulando a los partidos tradicionales, ha sido decepcionante, tanto como el arroz quemado de PP y PSCL que hoy anuncian presentar.