Un ajuste de cuentas, detrás del tiroteo en Salamanca en el que murió un joven de 27 años

Un nuevo ajuste de cuentas. Este presumiblemente podría ser la causa del tiroteo ayer en Salamanca de un joven de 27 años, J.A.L.J ., que en el momento de ser disparado paseaba con su hija en brazos, que milagrosamente resultó ilesa. El suceso ocurrió en la calle Maestro Soler, en los límites de los barrios de San José y El Tormes de Salamanca.

Se da la circunstancia de que los padres del joven fallecido están en prisión desde 2017 por su supuesta relación con el asesinato, en 2013, de una mujer en el barrio de Pizarrales de la capital salmantina, que apareció muerta con un golpe en la cabeza y varias puñaladas en su propia casa, que era considerada como un punto de venta de drogas. Agentes de la investigación tratan ahora de esclarecer si el tiroteo desencadenado ayer está relacionado con el asesinato que tuvo lugar hace siete años, informa Efe.

Además, el jove n tenía diversos antecedentes judiciales y, según las mismas fuentes, hace algo más de un mes había salido del Centro de Inserción Social de Salamanca, dependiente de la cárcel de Topas.

Todo ocurrió muy rápido. Sobre las 13,45 horas dos vehículos han llegado hasta el joven y varios hombres que iban en ellos, de familias gitanas, han abierto fuego contra él, dándose a la fuga posteriormente, sin que por el momento hayan sido localizados.

En el lugar del trágico suceso se encontraron seis casquillos de bala . La investigación trata de llegar ahora también hasta las personas que iban en los dos vehículos, que están identificadas, según fuentes del caso.

El suceso ha sumido de dolor al barrio, mayoritariamente de etnia gitana. En el momento del levantamiento del cadáver, numerosos familiares y vecinos lloraban y gritaban amenazas contra los autores de los hechos.