«En el 60% de los pacientes con problemas cervicales, estos tienen que ver con trastornos en la mandíbula»
Alrededor de 2.000 alumnos han pasado desde hace diez años por Fisiocyl, cuyo principal impulsor, Christian Conde, está especializado en trastornos temporomandibulares
«Muchas personas están mal diagnosticadas de dolores de cabeza», advierte
Fisiocyl, Fisioterapia de Castilla y León- nació hace ahora diez años con la intención de implementar la formación de los fisioterapeutas ya diplomados. «Es una de las profesiones en las que más necesitamos renovarnos y un compañero y yo nos dimos cuenta de que aquí no había ningún centro que nos ofreciera esa posibilidad», señala Christian Conde, impulsor junto a otro socio de la iniciativa. Desde entonces han pasado por este centro de formación alrededor de 2.000 alumnos -una media de 150 años-. La fisioterapia deportiva, el ejercicio terapéutico y la llamada terapia manual ortopédica son algunas de las áreas en las que se centran estos cursos «sólo para diplomados» que se imparten los fines de semana -viernes, sábado y domingo-.
El perfil del alumnos es «muy variado»; desde «los que acaban de terminar el grado que buscan más formación hasta profesionales que con el tiempo se ven estancados», apunta Conde. Por lo general se trata de especialistas entre 30 años y de 40 en adelante «que ven la necesidad de seguir formándose o que acostumbrados a tratar cierto tipo de pacientes quieren cambiar y especializarse en otra cosa». Fisocyl recibe además alumnos de distintos puntos de Castilla y León.
Además de impulsor de Fisiocyl, hace tiempo que Christian Conde se especializó en fisioterapia temporomandibular, un articulación que «tiene una vinculación muy estrecha con la región cervical». Dolores de cabeza, mareos o problemas de audición, además de todo lo que tiene que ver con la oclusión dental o masticación, son algunas de las consecuencias directas derivadas de este trastorno. «Hay muchas personas de las que hemos ido viendo que estaban mal diagnosticadas de dolores de cabeza, las temidas migrañas, que al final no eran tal y que caían en nuestras manos tras años de problemas crónicas«, apunta este especialista.
La mayoría de las personas que padecen este trastorno llegan a Fisiocyl derivados por otros especialistas porque tienen un problema asociado, «porque tienen problemas cervicales, de espalda o porque acumulan mucha tensión en los hombros. Luego, una vez que les vas haciendo pruebas es cuando descubres que su dolor de cabeza puede venir de la articulación temporomandibular».
Prevención
Pero, ¿hay alguna forma de prevenir estos trastornos? «Si», responde rotundamente Christian Conde, que subraya la importancia, por ejemplo, de vigilar a los niños. «Los niños que ya no lo son tanto -de entre 8 y 15 años- y se siguen chupando en ellos pueden terminar con una retrusión mandibular y con el tiempo problemas del paladar, de los dientes que se van desplazando y musculares, porque la musculatura se va contrayendo». En este caso, advierte a los padres de la necesidad de pasar por un odontólogo o un fisioterapeuta.
También advierte de cómo el estrés influye en trastornos de este tipo, sobre todo en personas mayores. «Hay épocas del año en que podemos tener problemas mandibulares que solo son momentáneos y que tampoco hay que darles mucha importancia porque terminan pasándose solo. pero cuando esto se repite en el tiempo o dura más de lo normal es cuando se debe acudir a un fisioterapeuta, un odontológo y si tiene asociados problemas emocionales también a un psicólogo».
«Antes no sabíamos que los problemas cervicales podían tener relación con la articulación temporomandibular»
Señala Conde que los pacientes con este tipo de trastornos han aumentado «en los últimos cinco o seis años». No es que antes no los hubiera, «pero no sabíamos que los problemas cervicales podían tener relación con la articulación temporomandibular». En este sentido, recuerda que los principales motivos por los que acudían a su consulta eran este tipo de problemas cervicales y lumbares. En ocasiones eran pacientes en los que la afección se cronificaban y volvían cada dos o tres meses». Esto dejó de ocurrir en la mayoría de los casos cuando comenzó a tratar a estos pacientes en relación a los problemas temporomandibulares. «Los resultados comenzaron a ser mejores. Si antes se me podía atascar la mitad de los pacientes, ahora el 10-15 por ciento. Además, añade que los estudios posteriormente les han dado la razón: «En el 60 por ciento de los pacientes con problemas cervicales, estos tienen relación con la articulación temporomandibular».
Por ello, este especialista considera imprescindible que «cualquier fisioterapeuta especializado en terapia manual que trate problemas cervicales tiene que saber evaluar la articulación temporomandibular, o al menos tener ciertos conocimientos».
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