«Las dos reinas», la trágica historia palaciega de Talavera
Bene Tapetado: «Es un relato tan intenso, tan maravilloso y tan crudo a la vez, que era necesario convertirlo en obra de teatro»
Talavera de la Reina, 1 de septiembre de 2018. Plaza del Pan. A las nueve de la noche, el rey Alfonso XI, su esposa, María de Portugal, y la amante del monarca, Leonor de Guzmán, contarán parte de la historia de la Ciudad de la Cerámica desde un escenario. La obra de teatro «Las dos reinas» recreará un triángulo amoroso palaciego con un final tráfigo, en el que Marta Hernández (María), Sergio Sanguino (Alfonso) y María Salas (Leonor) trasladarán al público a 1328. Después del teatro, se servirá una cena ambientada en la época medieval «para chuparse los dedos». Bene Tapetado es el alma máter de esta historia.
¿Por qué surge esta idea?
La idea surge ante la necesidad e inquietud por recordar y reivindicar una parte de la historia de nuestra ciudad, que, aunque conocida por algunos, suena muy lejana y poco dominada y entendida por la mayoría.
¿Por qué María de Portugal, Leonor de Guzmán y el rey Alfonso XI?
Los tres personajes principales tejen una historia de amor, celos, desengaños y traiciones que desembocan en tragedia. En este caso, la realidad supera a la ficción. No es una historia inventada, sino unos hechos fundamentales que ocurrieron de verdad y que cambiaron el rumbo de la historia, desembocando en la primera guerra civil en Castilla, los Trastámara contra los Borgoña. Es un relato tan intenso, tan maravilloso y tan crudo a la vez, que era necesario convertirlo en obra de teatro.
¿Qué aportaron esas figuras a la historia de Talavera?
La reina pasaba sola largos y prolongados meses en el alcázar o alcazaba de Talavera ante la ausencia del rey. El servir de morada a una reina le daba a Talavera un brillo especial que no tenían otras ciudades.
¿Qué habría sido de Talavera si no hubiese sido el regalo de bodas del rey a su reina?
Bueno, para empezar, lógicamente no tendría el apellido «de la Reina». Consecuentemente, no hubiera tenido el privilegio, entre otros, de quedar exenta de tributos durante muchos años, además de ganar en rango y abolengo, que para la época era muy importante.
¿Qué necesita la ciudad para recuperar la importancia de otras épocas?
Creo que Talavera de la Reina nunca ha dejado de ser importante al ser una ciudad situada en el centro de la península y servir de paso a comerciantes, ganaderos y muchos miles de agricultores que, al final, venían buscando sus tierras fértiles. Tiene la importancia de su cerámica, conocida mundialmente; sus fiestas de las Mondas, de las más antiguas de España....Quizás, le falta un poco lo que vamos a tratar de hacer con esta obra: conocernos un poco más para forjar más nuestras señas de identidad. Eso es lo que realmente le hace a una ciudad diferente, única y más fuerte.
Las cosas importantes se celebran en España ante una buena mesa, por lo que una cena medieval pondrá el broche. ¿Será un menú con estrellas Michelin?
Como dice un refrán castellano: «Después de la faena bien está una buena cena». No será para tirar cohetes, pero sí intentaremos hacerla fiel a la época cumpliendo con la liturgia de comer alimentos con las manos y con poca luz, lo cual ya es una aventura arriesgada y divertida a la vez.