Recas previene en las aulas la mutilación genital femenina
La comunidad educativa, sanitaria y las familias, coordinadas por Médidos del Mundo, realizan un trabajo en equipo para salvar a niñas de origen subsahariano de la ablación
En «la pequeña Mali» , como se conoce a la localidad toledana de Recas porque de sus 4.000 habitantes, 600 proceden de ese país africano, la comunidad educativa, sanitaria y las familias trabajan en equipo desde 2018 coordinadas por Médicos del Mundo , para impedir que las niñas en riesgo de sufrir mutilación genital femenina , un delito en España, finalmente no la padezcan cuando viajan a sus países de origen en vacaciones.
Este jueves, Día Internacional contra la Mutilación Genital Femenina , la labor de prevención realizada en Recas lidera la lucha en España para acabar con este problema detectado por Médicos del Mundo gracias a su trabajo de campo y a investigaciones realizadas con la población migrante con la que trabaja en España.
En esta batalla adquiere especial protagonismo el colegio público «César Cabañas Caballero» , con 437 alumnos, ejemplo del trabajo que la ONG coordina en Castilla-La Mancha, sobre todo en las provincias de Toledo y Albacete. «¿Qué vais a hacer estas vacaciones?», pregunta con ingenuidad una profesora al alumnado. «Voy a visitar a mi abuela a Bamako», contesta una alumna. Y es en este momento cuando se activa un protocolo que involucra a muchas personas.
Documento preventivo
La profesora comunica la información a la orientadora y al director del centro, Gonzalo Ballesteros. Y cita a la familia de la menor para corroborar la información y explicar, con el apoyo de la mediadora intercultural de Médicos del Mundo, el proceso por el que tienen que pasar antes y después del viaje. El padre y la madre deben acudir entonces al centro de salud y firmar un documento preventivo en el que se comprometen a no mutilar a su hija y, al regreso del viaje, permitir que la pediatra del centro médico de Recas revise a la menor para comprobar que no ha sufrido la ablación.
«En este compromiso les informamos de los riesgos que puede tener en su hija una actuación así, las consecuencias psicológicas y para la salud, y lo que puede conllevar jurídicamente: es un delito de lesiones y se le puede quitar la patria potestad a la familia», explica Gonzalo Ballesteros, volcado al cien por cien con este problema que atañe a los malienses, un 15% de los habitantes de Recas.
Ballesteros recuerda el primer caso: «Durante el viaje no se me iba de la cabeza cómo estaría la niña. Cuando vino la alumna enseguida subí a clase y me alivió verla contenta. Después de la revisión de la pediatra nos confirmaron que estaba bien y esa recompensa suple todo el esfuerzo», relata el director del colegio, que ya ha evitado al menos seis casos de mutilación en los últimos dos años.
Durante este tiempo, no hay constancia de que haya sufrido mutilación ninguna niña de Recas. Así lo confirma la coordinadora de inclusión social de Médicos del Mundo Castilla-La Mancha, Rosa López, quien incide en el apoyo de las mediadoras para atajar el problema. En cuanto a la edad en la que se realiza la mutilación genital femenina, López asegura que varía en función del país (Mali, Senegal, Costa de Marfil...). «Antes se hacía entre los 4 y los 12 años, pero ahora hay casos que se realiza a las pocas semanas del nacimiento» .
Para celebrar el Día Internacional de Tolerancia Cero con la Mutilación Genital Femenina, Médicos del Mundo Castilla-La Mancha ha organizado para este sábado, 8 de febrero, un acto en Toledo con «performance» en la plaza de Zocodover, donde también se instalará un mostrador informativo y se crearán mensajes contra la mutilación. En Albacete, se proyectará hoy un documental y habrá también charla-coloquio.
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