Una fiesta ilegal en una casa rural de lujo acaba con 65 personas denunciadas por más de 180 infracciones
No había menores entre los participantes, que se reunieron en una vivienda de Albarreal de Tajo convocados por las redes sociales y el boca a boca. El dueño de la casa se siente engañado: «El hombre que llamó me dijo que era una familia y me pidió una cuna para unl bebé por si la necesitaban»
Llegaron a la fiesta desde varios puntos del país y se consumieron sustancias estupefacientes, según la Guardia Civil
Se enteraron por las redes sociales y el boca a boca. Desde varios puntos de la geografía peninsular llegaron a la fiesta organizada en una casa rural de lujo, que había sido alquilada por un hombre en una urbanización de Albarreal de Tajo, una pequeña población toledana de apenas 700 habitantes .
Llegaron el sábado por la tarde y estuvieron una noche de desfase, pero la Guardia Civil acabó con el jolgorio el domingo por la mañana gracias a una llamada telefónica a su Central Operativa de Servicios (COS): la cantidad de coches aparcados en la parte trasera de la finca delató a los irresponsables.
Varias patrullas de La Puebla de Montalbán y del Carpio de Tajo se personaron en la vivienda, en la urbanización Las Canas. Los agentes contabilizaron 65 personas, todas mayor de edad, que fueron propuestas para sanción por incumplir más de 180 infracciones administrativas relacionadas con las medidas establecidas por el Covid-19: restricciones de movilidad, el uso de la mascarilla y por la reunión de más de 6 personas no convivientes .
Por los suelos de la casa, los agentes vieron numerosos envoltorios y restos de distintas sustancias estupefacientes que habían sido consumidas en la fiesta, así como pastillas de éxtasis, que fueron incautadas.
«Tuvieron que llegar de madrugada»
El propietario de la vivienda se siente engañado. «La alquilé dentro de las normas establecidas. El hombre que llamó me dijo que era una familia y me pidió que les preparara una cuna para un bebé por si la necesitaban» , cuenta a ABC el dueño, quien prefiere mantener el anonimato. «Me aseguraron que cumplían toda la normativa y también el número de personas establecido por ley para la reserva; pero ni mucho menos los que se reunieron después», afirma.
Por seguridad, declina explicar cómo es el acceso a la finca. Sí asegura que el sábado por la tarde entraron en la casa el número de personas establecido por contrato, por lo que sospecha que el grueso de los participantes en la fiesta ilegal llegó de madrugada.
«Nadie quiere que le hagan esta faena» , lamenta el propietario, quien desconoce si sus clientes cobraron alguna entrada al resto de participantes.
Casarrubios: el revelador aviso de una reyerta
No fue la única intervención de la Guardia Civil relacionada con el Covid-19 en la provincia de Toledo durante el fin de semana. En Casarrubios del Monte, a unos 50 kilómetros al norte de Albacerreal, varias patrullas acudieron al aviso de una reyerta en un bar fuera de las horas establecidas para apertura al público.
Los agentes no encontraron ninguna pelea, pero el establecimiento continuaba abierto y con gente en el interior incumpliendo las medidas sanitarias en vigor. Por eso formularon las propuestas de infracciones administrativas a los clientes, que se habían saltado el horario de restricción de movilidad nocturna. También fue denunciado el propietario del local por exceder el horario de cierre, según marca la legislación en materia de salud pública con medidas de Nivel II para los municipios de Castilla-La Mancha.
