Carranque quiere que la Junta mantenga la gestión municipal del parque arqueológico
La alcaldesa critica que el Gobierno regional quiera «unilateralmente» quitarles la gestión que ha permitido en los últimos años «consolidar el equilibrio económico del parque y establecer una senda crecimiento»
En Carranque no ha gustado la decisión del Gobierno de Castilla-La Mancha de no renovar el convenio para que la gestión del parque arqueológico siga siendo municipal, y va a reclamar por escrito una reunión urgente con la Junta para que reconsidere su postura.
En nota de prensa, la alcaldesa de Carranque, Amelia Guzmán, ha lamentado que en el escrito de notificación de resolución que han recibido, firmado por la viceconsejera de Cultura y Deportes, Ana Muñoz, no se expliquen las razones que han motivado la resolución del convenio, «que se lleva a cabo de forma unilateral, sin tener en cuenta la opinión del Ayuntamiento y el sentir de los vecinos de Carranque».
En este sentido, añade que durante el periodo de gestión municipal «el Ayuntamiento ha cumplido escrupulosamente todas sus obligaciones como organismo gestor y ha obtenido un excelente resultado en la conservación y el mantenimiento de las instalaciones», por lo que, a su juicio, «al adoptar esta decisión, la Junta no ha tenido en cuenta cuál es la mejor opción, ni el mejor proyecto para garantizar la conservación del patrimonio de Carranque».
«Desconocemos a qué motivos obedece la ruptura drástica e injustificada del modelo de gestión que tan buenos resultados ha dado hasta ahora», ha indicado la alcaldesa, que insiste en que el Ayuntamiento «ha conseguido consolidar el equilibrio económico del parque y establecer una senda crecimiento y mejora continua, así como contribuir a la creación de empleo y la dinamización económica y turística de todo el municipio».
Al respecto, avanzó que «el Ayuntamiento estará vigilante» para que la empresa concesionaria de la gestión, Tragsa, cumpla con todas sus obligaciones y garantice una gestión adecuada de las instalaciones. «Nos preocupa profundamente que el parque retroceda al peor momento de su historia, cuando el parque llegó a cerrarse siendo Tragsa la responsable de su explotación y cuando las instalaciones se utilizaban para fines muy distintos a los culturales».
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