El edificio de la Consejería de Hacienda tendrá una reforma integral

Con un coste de unos 9 millones de euros, se busca mejorar la eficiencia energética

Fachada de la Consejería de Hacienda en pleno centro de Toledo ABC

A. M.

El arquitecto Ignacio Haan fue el encargado de realizar el proyecto del edificio del Hospital del Nuncio Nuevo, situado en la calle Real en pleno Casco Histórico, cuya construcción finalizó en 1793. Fue considerada una de las obras de arquitectura hospitalaria más importantes de Europa en el siglo XVIII, dedicada al tratamiento de enfermos mentales. Terminada esa función, desde 1985 alberga servicios administrativos y es la sede de la actual Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas del Gobierno de Castilla-La Mancha, tras su adaptación por parte de los arquitectos Guillermo Cabez Arnáiz, José María Gentil Baldrich y José María Marsa González.

Ahora, ese edificio histórico, que cuenta con dos plantas sobre rasante y otra semisótano, se va a someter a una profunda reforma, tanto por los deterioros observados como por el objetivo marcado por la administración regional de «rehabilitar distintos edificios públicos con el fin de mejorar su eficiencia energética y ambiental, así como su habitabilidad, accesibilidad y conservación mediante el uso de energías renovables », según indican desde la propia Consejería de Hacienda.

Para esta reforma integral, bajo las condiciones específicas del régimen de protección aplicable, en este caso el Plan Especial del Casco Histórico de Toledo, está previsto que esta misma semana se reúnan los redactores del proyecto para la definición definitiva del mismo. Según los plazos para este tipo de actuaciones, se prevé que no sea hasta finales de este año como pronto cuando se puedan empezar a ejecutar estas obras , que lógicamente deberán ir acompañadas antes por los planes del traslado provisional a otras dependencias de la Junta de las aproximadamente 200 personas que desarrollan sus trabajo en esta consejería.

El coste aproximado para esta rehabilitación integral ronda los 9 millones de euros, según ha podido saber ABC, un presupuesto que estará cofinanciado por la Unión Europea con fondos del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR), a través del Programa de Rehabilitación de Edificios Públicos (PIREP).

Según el anteproyecto, el estado actual del edificio es «aparentemente bueno», pero al margen de las necesidades que atienden al medio ambiente y la energía eficiente, existen filtraciones de agua, humedades o fisuras en la fábrica de ladrillo de las fachadas, entre otras cosas.

Cuatro áreas

Desde el punto de vista de organización funcional del edificio, se han señalado cuatro áreas independientes: consejero y gabinete del consejero, Secretaría General, Dirección General de Presupuestos y Dirección General de Política Financiera y Fondos Comunitarios. A ellos se unen otros espacios subsidiarios comunes.

El anteproyecto indica que entre las actuaciones se encuentra la mejora de la climatización mediante sustitución de la caldera de gasóleo y de la instalación frigorífica existentes por equipos de aerotermia de alta eficiencia, lo que permitirá eliminar el consumo de combustibles fósiles y reducir las emisiones de dióxido de carbono.

Asimismo, se va a reparar toda la carpintería, puertas y ventanas, ya que su estado actual supone una merma considerable en el nivel de eficiencia energética global. Una de las acciones más importantes va a ser la mejora y aislamiento de toda la cubierta, ya que carece totalmente del mismo . También se va a sustituir la iluminación actual, totalmente obsoleta, por otra de tipo led.

Para las fachadas está previsto su restitución a su situación original, el tratamiento de las rejas y la eliminación de los cables que van por ellas. Y en el caso de las humedades en el semisótano se estudiará el problema para su eliminación.

Patios cubiertos

Asimismo, se van a cubrir los cuatro patios con los que cuenta el inmueble, posiblemente con vidrio , lo que también contribuirá a mejorar la eficiencia energética global, a la vez que se aprovechará más el espacio útil del edificio.

Finalmente, se contempla la recuperación del estado original de los espacios interiores, así como el acondicionamiento de los derrumbaderos en el exterior de la finca, en la zona sobre la muralla, actualmente una zona sin urbanizar y con el crecimiento de la vegetación sin tratamiento alguno.

Con todas estas actuaciones, se estima una reducción del consumo de energía de entre un 45 y un 50% . Pero, además, con esta intervención también se persigue conservar y poner en valor un edificio de finales del siglo XVIII, que está declarado Bien de Interés Cultural (BIC), con la categoría de monumento, así como adaptar las dependencias administrativas al actual concepto de una administración abierta y moderna, con lo que la distribución de espacios sufrirá modificaciones.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación