Aparece en Toledo el manuscrito que pronosticó la Revolución Francesa con 33 años de antelación
El escritor y catedrático salmantino Diego Torres Villarroel anunció en 1756 la caída de la monarquía gala
Se llegó a dudar de su existencia pero ha sido al fin localizado y analizado por el filólogo, académico y escritor Antonio Lázaro. Diego Torres Villarroel , uno de los mayores escritores del siglo XVIII, consiguió que sus almanaques astrales anuales fueran auténticos best sellers. El año de 1756 uno de sus pronósticos, contenido en una décima (un poema muy breve), anunciaba con 33 años de antelación la Revolución Francesa . Hasta la fecha, el pronóstico solo se conocía por un opúsculo impreso en Barcelona hacia 1794, algo posterior al estallido de la revolución en el país vecino.
Pero ahora, por fin ha sido analizado el manuscrito del gran satírico y profeta de Salamanca por este investigador conquense radicado en la ciudad de Toledo, en cuyo archivo jurídico y literario, heredado de su padre y de su abuelo, letrados ambos, se encuentra la décima.
El pronóstico se limita a proponer en su primera estrofa una suma que da una fecha: 1790. Y en la segunda, a pronosticar la caída final de la monarquía gala, el anuncio de unos hechos que literalmente se cumplieron. Los cuatro primeros versos son un acertijo numérico que suma como resultado una cifra fatídica: 1790. La décima manuscrita incluye, en efecto, una cuenta al margen con la suma que da la fecha (rebasando en solo un año un fenómeno histórico que se prolongó por espacio de varios años), lo que apunta a su carácter de posible borrador de autor.
En relación a la versión impresa conocida, Lázaro apunta a una corrección o lo que hoy se denomina en el mundo editorial, editin g. En su opinión, este mejora la estrofa final pero hace más prosaico el arranque. «Tiene más encanto cuando cantes mil cantares que cuando los mil contarás. La repetición de primera en los versos 7 y 10, fruto de la inmediatez de una primera composición, es desde luego mejorada por la rima postrera- primera de la versión impresa», explica Lázaro.
Torres, catedrático de Matemáticas en la Universidad de Salamanca y celebrado poeta y narrador (su Vida , a caballo entre la autobiografía y la novela picaresca, es quizá el libro más reeditado del XVIII español), presentaba sus profecías como mero divertimento , consciente de que la astrología era una disciplina a contracorriente en el siglo de las luces. Pero sus aciertos clamorosos (la muerte del rey Luis I y el motín de Esquilache, entre otros) fueron muy controvertidos y le enfrentaron con el poder político. El decreto de prohibición del ministro ilustrado Campomanes, tildando de superchería reaccionaria los pronósticos, dejó fuera de la imprenta a numerosos de ellos, que Torres componía con gran antelación.
Según el escritor conquense Antonio Lázaro , la décima de Torres —que ha sido llamado por algunos autores «el Nostradamus español» — es mucho más contundente y precisa incluso que las que el célebre Nostradamus dedicó al mismo suceso. En una de sus famosas Centurias , este anuncia los cantos y demandas del «populacho esclavizado» y la imagen de señores y príncipes presos. «En su pronóstico, Torres es mucho más específico : el suceso que predice no es una mera revuelta antiseñorial, de las que hubo muchas en la Baja Edad Media y en el Renacimiento, sino todo un cambio o fin de era: el derrocamiento de la monarquía absoluta, el tránsito de la edad Moderna a la Contemporánea ». Esta es la décima contenida en el manuscrito que ahora presenta ABC:
Don Diego de Torres pronostico año de 1756 decima
Quando cantes mil cantares
con los trescientos doblados
y 50 duplicados
con los 9 dieses más
entonces tu lo veras
misera francia te espera
la calamidad primera
con tu Rei y tu Delfín
y con esto tendrá fin
tu maior gloria primera
Aunque el propio Torres protegía sus pronósticos con un halo de ironía y de escepticismo, sus cálculos se basaban rigurosamente en la astrología natural (posiciones de los astros, ciclos climáticos, ubicación geográfica, evolución política) por lo que conseguía interesar al público lector y a la vez entretenerlo. Datando en 1790 la caída del «ancien Régime» francés, la pospuso cronológicamente en un año pero a certó en la predicción de lo que fue no un suceso puntual sino un complejo proceso que duró varios meses y aún años.
El autor del hallazgo cree que este manuscrito confirma la realidad de la controvertida profecía española sobre la revolución francesa , aporta un elemento más de interés a la obra de por sí interesante de Diego Torres Villarroel y merece ser conocido tanto por la comunidad académica como por el público en general.
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