Álvaro Lorenzo torea como si estuviera en el patio de su casa
El toledano corta tres orejas en la corrida mixta del Corpus, Eugenio de Mora se queda en dos y Tomás Rufo da una vuelta al ruedo
Cuánto cobra un torero

La ecuación no falla: llega el Corpus a Toledo, Álvaro Lorenzo se viste para torear en la plaza de su ciudad, vuelve a ilusionar a sus paisanos y tres horas después (porque las corridas ya se han convertido en maratones) suma una nueva puerta grande. Así ha ocurrido desde que tomó la alternativa. Cinco Corpus y cinco salidas a hombros , aunque este domingo no lo pudiera materializar por el dichoso coronavirus.
Lorenzó arrancó tres apéndices de un lote de El Cortijillo. El momento cumbre de la tarde llegó con el quinto toro, llamado ‘Clarinete’, al que Lorenzo desorejó en una labor que fue a más. Empezó la faena en los medios, con la muleta plegada, lo que popularmente se conoce como «el cartucho de pescao» y que siempre resulta emocionante. Al principio el toro perdió las manos y parecía que se iba a quedar en un suspiro, pero se repuso, sacó fondo y, sobre todo, mucha clase, humillando bien abajo.
Claro que para que luciera hacía falta un torero asentado, que le fuera desplegando el trapo igual que se le enseña un caramelo a un niño. Hubo un par de buenas series con la derecha, de cuatro pases y remate con el de pecho. Con la izquierda bajó el tono y, por eso, Lorenzo volvió a la derecha y desde el tercio enjaretó unos cuantos muletazos a cámara lenta, gustándose. Ya con la espada de verdad dio varios ayudados por alto en el mismo tono y un monumetal trincherazo antes de volcarse en un gran estocada.
En su primer toro había vivido un gran susto , cuando en un quite por tafalleras tropezó con una pata del animal, cayó al suelo y quedó a su merced, pero por fortuna él mismo se hizo el quite con el capote. Con la muleta ‘Califa’ le punteó demasiado el engaño al principio y, al entender que no había oportunidad para el lucimiento, optó por el arrimón, manoletinas incluidas. Pese a un pinchazo, se le otorgó una oreja.

Eugenio de Mora lleva 24 años como matador y este domingo hizo su paseíllo número 34 en Toledo (el 25 desde que tomó la alternativa, precisamente en esta plaza). Y eso se nota. Conoce su oficio como pocos y siempre da la sensación de que da a los toros lo que le van pidiendo. Otra cosa es que surja la emoción. Cortó una oreja a cada uno de sus oponentes y quizá lo mejor fue el inicio de faena al primero, de rodillas, muy firme, y los pases de pecho.
Tomás Rufo es todo lo contrario, un recién llegado. Si es el novillero con picadores que más ilusión genera en el escalafón es porque tiene ese 'nosequé' distinto, que no se ve todos los días, que no lo venden en El Corte Inglés. Mostró que de valor anda sobrado y que se queda muy parado, ya fuera en luquecinas, gaoneras o haciendo el poste. Sobresalió algún natural y, por encima de todo, derechazos que se convirtieron en redondos de casi 360 grados. Eso sí, debe mejorar con la espada, lo que evitó que paseara trofeo alguno.

Corrida mixta del Corpus de Toledo. Domingo, 6 de junio de 2021. Tarde calurosa, más típica del verano, por encima de los 30 grados. Buen ambiente, sobre todo en la zona de sombra. Cuatro toros de El Cortijillo y dos novillos de Alcurrucén, en general bien presentados. El mejor fue el quinto, ‘Clarinete’, con recorrido y humillación.
- Eugenio de Mora , de azul pavo y oro. Estocada (oreja). En el cuarto, pinchazo y estocada caída (oreja).
- Álvaro Lorenzo , de grana y oro. Pinchazo y estocada caída (oreja). En el quinto, gran estocada (dos orejas).
- Tomás Rufo , de verde oliva y oro. Dos pinchazos, aviso y media estocada (ovación con saludos). En el sexto, pinchazo hondo, estocada trasera y dos descabellos (petición de oreja y vuelta al ruedo).
Noticias relacionadas