Martínez de Pisón rescata en Toledo un hecho poco conocido de Franco
El escritor zaragozano presenta este martes «Filek, el estafador que engañó a Franco» en el X Festival CiBRA
![El escritor zaragozano Ignacio Martínez de Pisón, autor de «Filek, el estafador que engañó a Franco»](https://s3.abcstatics.com/media/espana/2018/11/15/pison-kWAC--1248x698@abc.jpg)
Casualidad o no, el destino ha querido que Ignacio Martínez de Pisón (Zaragoza, 1960) rescate en Toledo este martes, 20 de noviembre, un hecho poco conocido del pasado de Francisco Franco, justo el mismo día que se cumplen 43 años de su muerte. El dictador fue víctima de una estafa por parte de un supuesto inventor para fabricar en España gasolina hecha con agua, vino, verduras y aditivos . Esta historia es la que narra el escritor zaragozano en su último libro, «Filek», cuyo título hace mención al nombre del químico estafador de origen austriaco Albert von Filek .
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Aprovechando esta coincidencia con el 20 de noviembre, y preguntado por su opinión sobre el actual debate de los restos mortuorios de Franco, Martínez de Pisón cree que «la exhumación tendría que haberse hecho mucho antes, pero ya sabemos que los ritmos de la política son peculiares». El autor, Premio Nacional de Narrativa en 2014, visitará este martes por primera vez Toledo gracias a la décima edición del Festival Internacional del Cine y la Palabra (CiBRA), donde presentará «Filek, el estafador que engañó a Franco» (Seix Barral) en la Librería Taiga a las 19.00 horas .
![Martínez de Pisón rescata en Toledo un hecho poco conocido de Franco](https://s1.abcstatics.com/media/espana/2018/11/15/filek-kv0H-U301611179278EeB-220x320@abc.jpg)
¿Por qué se decantó por una novela de no ficción o sin ficción para contar la historia de este personaje cuya vida da para una novela?
No quería que la invención contaminara la historia. Ya me ocurrió con un libro anterior, «Enterrar a los muertos», en el que hablaba del asesinato de un republicano a manos de unos sicarios estalinistas. La historia que estaba investigando era material muy sensible, y no podía permitirme que unas gotas de ficción contaminaran la historia en general, que era un esfuerzo de documentación, no de imaginación. Con «Filek» he hecho lo mismo. Todo lo que cuento está documentado.
¿Qué le atrajo de este personaje, más allá de su relación con Franco?
Hay muchas zonas de sombra en la historia de España. Zonas de sombra porque en su momento la censura franquista tapó muchas cosas y porque más tarde los historiadores no han fijado su atención en ellas. El caso de Filek es un buen ejemplo de ello. Un estafador que, tras pasar toda la guerra civil en cárceles republicanas, aprovecha los contactos que ha conseguido para acceder al círculo más estrecho de Franco y convencerle de que con una mezcla de hierbas y agua del río Jarama va a conseguir que España se convierta en la primera potencia exportadora de petróleo. Parece un disparate pero ahí está: en los periódicos de la época, en el BOE, en los archivos...
Supongo que para escribir esta novela ha precisado de una ardua tarea de documentación. ¿Dónde ha rastreado para saber más de la vida de Albert Von Filek?
Las hemerotecas me dieron pistas muy valiosas. Pero los datos decisivos los encontré en archivos como el Archivo General de la Administración, de Alcalá, que tiene auténticos tesoros para los investigadores.
Ha tenido que cubrir algún vacío de la historia real de Filek con algún elemento de ficción para completar su narración?
Cuando lo hago, se lo advierto al lector. Por ejemplo, cuando poco antes de las sacas de Paracuellos encierran en la misma cárcel de Filek a otro famoso estafador de la época que también engañaba a la gente con falsas gasolinas sintéticas. Estuvieron juntos en la misma galería de la Modelo dos señores que vivían de practicar la misma estafa.¿Hablaron o no hablaron? No puedo demostrar que lo hicieran, pero puedo imaginar que lo hicieron...
Filek no dejaba de ser un pícaro al más estilo español, por muy austriaco que fuera.
Era un estafador internacional, que sabía idiomas, se hacía pasar por aristócrata y tenía denuncias pendientes en varios países europeos. Pero cuando llega a España, donde pasa periodos de gran precariedad económica, se convierte en un pícaro en la mejor tradición del Lazarillo.
Aun así, Filek pudo disfrutar poco de los beneficios económicos de sus estafas y de la vida, ya que pasó gran parte de su tiempo en España encarcelado, tanto con la II República como durante el franquismo. ¿Qué tuvo este personaje para ser repudiado por unos y por otros?
Su periodo de opulencia dura muy poco, digamos un año, y enseguida vuelve a ser lo que siempre ha sido: un muerto de hambre. Y cuando ya se ha destapado todo el asunto de la gasolina empieza a cometer delitos que no hacen ninguna gracia a sus protectores del régimen franquista. Por eso acaba como acaba, encerrado en un campo de concentración alavés en el que las condiciones de higiene y salubridad eran terribles.