ARTES&LETRAS CASTILLA-LA MANCHA
Fotoversos
Por Jesús Maroto y Jesús Guío
Nunca me dijiste
lo que quería escuchar,
sí lo que merecía.
Nunca me diste de lado
y fue a tu lado cuando, de verdad,
brilló la amistad.
Nunca una tarde fue tan amena
como en tu compañía:
hablando, bebiendo, fumando,
riéndonos. Lejos de los poetas
que cuentan con los dedos
pero no lo que pasa delante de ellos.
De los cronistas a sueldo.
De las jóvenes promesas
que nunca habían roto un plato.
O de los altivos consagrados
que ya nada tenían que enseñarnos.
Pronto aprendimos a utilizar,
cuando el momento lo exigía,
nuestra alma de repuesto.
O el disfraz a juego con lo que se cocía
en los fogones del amanecer.
También, a cruzar de un salto
la frontera entre el dolor y la alegría.
Y es que nunca nos caímos de la higuera,
ni nos quemamos en la hoguera de las vanidades.
Nunca nos parecieron perdidas las causas
del amor imposible, ni nos confundimos
de bandera, de caricia o de promesa.
Y lo que escribimos en esos años
ya está en una botella
por si allende los mares
alguien lo encuentra
y le da lustre.
Para José del Saz-Orozco