Vecinos de Totanés abandonan una verbena para retener a tres ladrones por robar en una vivienda

El vehículo de los presuntos autores apareció calcinado en las inmediaciones del cementerio

El vehículo de los ladrones arde en las inmediaciones del cementerio de Totanés

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El pasado fin de semana, vecinos de Totanés (Toledo) entregaron a la Guardia Civil a tres individuos a los que habían retenido por robar, presuntamente, en una vivienda de este pueblo de unos 350 habitantes censados. Horas más tarde, el vehículo de los tres supuestos ladrones apareció calcinado en las afueras del municipio.

La historia arranca la madrugada del sábado, en plena fiestas patronales en honor de la Inmaculada Concepción. Se estaba celebrando una verbena cuando empezó a circular por WhatsApp y por el boca a boca que unos delincuentes habían asaltado una casa, de la que se habrían llevado diversos objetos.

Un grupo de vecinos organizó una batida y recorrió calles y alrededores del pueblo. Localizaron a tres individuos, todos españoles, a los que dieron el alto al grito de «policía secreta», según cuentan por el pueblo. A los sospechosos se los retuvo hasta que agentes de la Guardia Civil se personaron en el lugar.

Fuentes oficiales de la Comandancia de Toledo, adonde fueron trasladados los tres individuos, confirmaron a ABC que los detenidos portaban algunos de los efectos robados cuando fueron entregados a los agentes.

En libertad provisional

Horas más tarde de la detención, el vehículo de los arrestados apareció calcinado junto a la carretera que conduce al cementerio de Totanés. Se trataba de una furgoneta pequeña de color azul y con matrícula de Salamanca. Algunos comentarios apuntan a que los autores del incendio serían vecinos del pueblo. Otros, en cambio, señalan a individuos llegados de fuera de la localidad, que este lunes celebra el día grande de sus fiestas patronales mientras que los presuntos autores del robo ya están en la calle.

El domingo pasaron a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 7 de Toledo, que estaba en funciones de guardia. Después de tomarles declaración, el juez decretó su libertad provisional y estableció una medida cautelar: la obligación de comparecer ante el juzgado cuantas veces sean llamados , según han informado a ABC fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha. Les imputa la presunta autoría de un delito de robo con fuerza.

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