El pregón de Marisa Martínez abre otra atípica Semana Santa en Toledo
Un discurso en el que estuvo muy presente la crisis del coronavirus, con la caridad como hilo conductor
La Catedral Primada acogió el jueves por la tarde y, por primera vez en su historia, un pregón de Semana Santa, a cargo de la ex directora de Cáritas de Toledo, Marisa Martínez. Fue un acto especial porque el año pasado, en plena pandemia, no pudo realizar el pregón por el confinamiento. ,Un discurso en el que estuvo muy presente la crisis del coronavirus, con la caridad como hilo conductor. La pregonera invitó a vivir una procesión desde el corazón, «una meditación que nos haga revivir lo que Jesús pasó». Se abre así otra Semana Santa especial, sin procesiones, pero con esencia espiritua y con celebraciones litúrgicas, cumpliendo las medidas de seguidad.
Marisa Martínez es en la actualidad responsable del centro de distribución de Cáritas diocesana «Virgen del Sagrario».
Al finalizar el acto, el arzobispo de Toledo, Francisco Cerro Chaves , dirigió una oración por todas las víctimas de la pandemia en este duro año y, en especial, por todos los hermanos y cofrades que no podrán vivir esta Semana Santa.
En la Catedral de Toledo, pregón de Semana Santa a cargo de Doña Marisa, responsable del centro de distribución de Cáritas diocesana "Vírgen del Sagrario" finalizando con la oración por todos los cofrades fallecidos en la pandemia. @SICP_de_Toledo @caritasto pic.twitter.com/vd0Rd8TUCl
— Francisco Cerro Chaves (@Obispofcerro) March 25, 2021
✝️ Nuestra portavoz @claudiaalonsso y los concejales del PP @pablojcorrales @agranellcalvo y @pepegamarra1 han asistido esta tarde en la Catedral al pregón de la Semana Santa de Toledo 2021 pronunciado por Marisa Martínez. pic.twitter.com/3TBbQ8wQT4
— PP Ayto Toledo (@grupopptoledo) March 25, 2021
Antes de dar comienzo el pregón, se procedió a la entrega de los Nazarenos de Honor 2021, que volvieron a ser los designados por la Junta de Cofradías del pasado año. Así, Consuelo Martínez de Mendívil , camarera de la Virgen de la Soledad, y Rafael Rodríguez, hermano penitente de Cristo Redentor, fueron galardonados por su entrega, devoción y trabajo.
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