Multitudinario Viernes Santo en Toledo

En Toledo no cabe un alfiler, como en los mejores tiempos, en una Semana Santa que está batiendo récords de visitantes. La ciudad estuvo el viernes abarrotada de fieles y turistas para contemplar la procesión del Santo Entierro, una de las más populares de la Semana Santa toledana y en la que participaron siete cofradías que partieron de diferentes iglesias. Tras varios años sin poder salir, primero por la lluvia y después por la pandemia, los cofrades volvieron a desfilar por la ciudad en una jornada marcada por el buen tiempo, la luz de la luna llena y las ganas de calle.

La procesión del Santo Entierro estuvo presidida por primera vez por el arzobispo de Toledo, Francisco Cerro, que tomó posesión de la diócesis unas semanas antes de la pandemia del coronavirus. Se incorporó al cortejo en la calle Hombre de Palo, en donde se arman tradicionalmente las siete cofradías.

La cofradía del Calvario abrió la procesión desde su sede canónica, la iglesia de El Salvador, con las imágenes del Santísimo Cristo de la Fe, y Nuestra Señora del Rosario. Después, de la iglesia de Santa Leocadia, salió el Santísimo Cristo de la Misericordia y María Santísima de la Caridad, portadas a hombros por cofrades de ambos sexos, que después de saludar a las monjas del monasterio de Santo Domingo el Antiguo tuvieron que vencer el obstáculo que representa la subida de la escaleras de la plaza de Padilla hasta llegar a Hombre de Palo. De la iglesia mozárabe de Santa Eulalia, su sede canónica, salió el Lignum Crucis y de la iglesia mozárabe de Santas Justa y Rufina, se sumó al cortejo el Santísimo Cristo del Descendimiento, el paso más difícil de llevar por su peso.

Cerró el cortejo procesional Nuestra Señora de la Soledad y, al final, una representación municipal, encabezada por la alcaldesa, Milagros Tolón, También participaro el vicealcalde, José Pablo Sabrido y los concejales Noelia de la Cruz, Marta Medina, Maite Puig, Ana Belén Abellán, Juan José Pérez del Pino y Pablo García, del PSOE. Y también del PP, como Pablo Corrales, Ciudadanos, Araceli de la Calle y Julio Comendador, así como el concejal no adscrito, Luis Miguel Núñez.

Después, ya de madrugada, desfiló el Cristo de la Buena Muerte desde San Juan de los Reyes.