Estos son los primeros once árboles que se van a clonar en el 'Vivero Histórico' de Toledo
Un proyecto de la Real Fundación en colaboración con la Consejería de Desarrollo Sostenible para preservar la riqueza botánica de la ciudad
La producción de plantas se tratará en las instalaciones del vivero forestal, en San Pedro el Verde, a partir de semillas y estaquillas de ejemplares vegetales
Esta semana se ha conocido un proyecto pionero cuyo objetivo es fomentar conocimiento y la preservación de la riqueza botánica de la ciudad de Toledo, especialmente de las especies de carácter autóctono y que tenga un alto valor medioambiental. Se trata del 'Vivero Histórico' que ha puesto en marcha la Real Fundación Toledo, en colaboración con la Consejería de Desarrollo Sostenible. Uno de sus objetivo es reproducir o clonar ejemplares vegetales concretos de la ciudad de Toledo con alto valor por su edad, significación histórica, rareza o porte. Unos trabajos que se realizarán en las instalaciones del vivero forestal, en San Pedro el Verde, a partir de semillas y estaquillas de ejemplares vegetal que seleccione la Real Fundación.
Los ejemplares escogidos inicialmente para ser reproducidos o clonados (dependiendo de las características de cada especie y en función de su dificultad), y siendo este listado aún una propuesta sujeta a posibles ampliaciones, son los siguientes:
1. Laurel plantado por Gustavo Adolfo Bécquer : plantado por él mismo según la tradición en la casa de la Calle de San Ildefonso que el poeta habitó en la segunda mitad del s. XIX.
2. Tejo del Palacio Arzobispal : probablemente la mayor joya botánica de Toledo por su rareza y antigüedad, plantado en 1604 en el patio del Palacio Arzobispal.
3. Almez centenario que crece junto a la Ermita del Valle: imponente ejemplar en un lugar absolutamente emblemático de la ciudad, con la mejor vista de Toledo. Fue fotografiado ya en 1863 con notable porte, por lo que pudo nacer alrededor de 1800.
4. Ciprés del Monasterio de San Clemente : de enorme verticalidad y pureza de líneas, crece en un lugar cargado de resonancias místicas desde hace siglos.
5. Naranjo del Claustro de la Catedral de Toledo/Naranjo de Santa Clara : escasean en Toledo los naranjos por su sensibilidad a las heladas, por lo que estos dos ejemplares suman a su rareza el hecho de crecer en lugares con gran simbolismo.
6. Moral del Parque de Safont: una auténtica reliquia botánica, tumbado por el peso de su tronco y por el paso de los años, aún mantiene brotes verdes. Esta morera negra debió plantarse hacia 1750 y aparece en fotografías antiguas.
7. Plátanos del Parque de la Vega/Plátano de la Fábrica de Armas : estos ejemplares de gran porte son muestras de las primeras plantaciones de esta especie, muy impulsadas en tiempos de Carlos III (fábrica de Armas). Los del parque de la Vega datan de la creación de este espacio verde a mediados del siglo XIX.
8. Encina de Montesión: especie emblemática que tiene en este ejemplar su mejor muestra en Toledo. Crece en la rotonda de la Carretera de la Puebla de Montalbán, en el cruce con la subida a Montesión. Tiene varios siglos de edad.
9. Almendro del Hotel La Almazara: con 11 metros de altura es probablemente el más grande de la ciudad. Es una especie con gran simbolismo por ser la almendra la base del dulce más internacionalmente reconocido de Toledo: el mazapán.
10 . Pino piñonero de la Escuela de Artes : plantado por iniciativa del primer director de la Escuela de Artes, el pintor Matías Moreno, en los primeros años del s. XX.
11. Cedro del Parque de la Vega: con 30 metros de altura, constituye un hito paisajístico de la ciudad junto a la Puerta de Bisagra. Data de la creación del parque, hacia 1870.
Una vez obtenidos los ejemplares en el vivero, en el momento de hacer entrega de ellos en alguna de las acciones de educación ambiental asociada, se hará entrega de un certificado avalado por la Real Fundación de Toledo y la Junta de Comunidades en el que se garantice que esa planta es hija (o un clon) del ejemplar concreto que motivó su inclusión, explicándose también brevemente la historia del «árbol padre» y el porqué de su importancia botánica, histórica o simbólica.
Así, otros de los objetivos de este 'Vivero Histórico' será fortalecer el lazo sentimental entre los toledanos y su ciudad utilizando su patrimonio vegetal enfocado bajo el prisma de la historia; fomentar el conocimiento botánico de la ciudadanía, con sus implicaciones culturales asociadas (etnografía, paisaje, toponimia, gastronomía, historia…), con especial hincapié en las generaciones más jóvenes ; incitar a la ciudadanía a conocer la historia de la ciudad a través de ejemplares concretos o especies presentes en ella, con actividades y publicaciones asociadas al proyecto (rutas, itinerarios, folletos, libros, charlas, página web); favorecer la multiplicación de estos ejemplares, especialmente los de carácter autóctono, i ncitando a la población a conservarlos y plantarlos en sus casas y espacios públicos y de este modo fijar cultural y genéticamente su presencia en la ciudad y, por último, dotar a las administraciones de ejemplares de elevado valor y simbolismo para su plantación en espacios públicos.