Asociación de Guías Oficiales el Greco y Toledo - Opinión
La habilitación de guía turístico de Castilla-La Mancha, por supuesto, ¡NO se regala!
«¿Cuál es el problema de que se quieran poner barreras inexpugnables a la competencia reglada y leal? ¿Perdería sus competencias un médico andaluz si tuviera que ejercer en Castilla-La Mancha? ¿Sería lógico que un arquitecto extremeño no pudiera ejercer en nuestra región por no ser castellano-manchego?»
Desde la «Asociación de Guías Oficiales el Greco y Toledo» denunciamos la ilegítima defensa que Cecam, la Cámara de Comercio y Fedeto, como principal adalid de los guías de APIT Toledo, ejercen tratando de confundir a la opinión pública, menospreciando e infravalorando la cualificación necesaria y rigurosa que va a quedar perfectamente recogida con el nuevo decreto de guías de turismo de Castilla-La Mancha.
De ningún modo, conseguir la habilitación de guía de turismo de Castilla-La Mancha será un regalo sino un reconocido mérito, tanto por la formación exigida a los candidatos, el diseño de pruebas adicionales a superar o la cualificación por el ejercicio profesional contrastado a lo largo del tiempo y debidamente acreditado.
Desde Fedeto y Apit no reconocen el derecho a legislar a favor de la mayoría del sector, en materia de turismo, a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. Desde Fedeto y Apit niegan igualmente el R.D. 581/2017 de 9 de junio, a través del cual se actualizan todas las anteriores directivas y reglamentos relativos al «Reconocimiento de las Cualificaciones Profesionales» y a la «Cooperación Administrativa a través del sistema de Información del Mercado Interior» (Reglamento IMI).
Aducen a una falta de calidad como argumento, sin embargo, lo que están encubriendo es un absoluto intervencionismo en la profesión, una especie de exclusión y una clara discriminación. Tratan de inferir una limitación abusiva en el desarrollo de la actividad económica, laboral y educativa y, para nada les interesa garantizar la seguridad jurídica de los profesionales. Hay que recordar que la obtención de la habilitación no garantiza un puesto de trabajo, sino que sólo acredita las competencias para poder ejercer la profesión, ¡nada más!
¡Más sentido común y menos hipocresía!
¿Cuál es el problema de que se quieran poner barreras inexpugnables a la competencia reglada y leal? ¿Perdería sus competencias un médico andaluz si tuviera que ejercer en Castilla-La Mancha? ¿Sería lógico que un arquitecto extremeño no pudiera ejercer en nuestra región por no ser castellano-manchego? ¿Tenemos todavía alguna duda de que lo que están defendiendo Apit y Fedeto no son déficits de calidad?
Por cierto, las presidentas de Apit y Alficén no tienen habilitación por Castilla-La Mancha, pero aún siendo guías oficiales a todos los efectos, ¿se defienden ellas a sí mismas con sus reivindicaciones?, ¿a quién defienden entonces?, ¿a qué instrucción obedecen?, ¿garantizan el amparo de aquellos guías que como ellas no tienen habilitación por Castilla-La Mancha quienes no pueden manifestarse con libertad?