Se pone la primera piedra del parque de bomberos de Sacedón

Este martes se ha puesto la primera piedra del parque de bomberos de Sacedón . Las obras salieron a licitación por 2.174.000 euros y se han adjudicado por 1.577.000 euros. El plazo de ejecución es de 20 meses, por lo que se espera que esté listo a finales del 2023.

«Hoy es una efeméride muy importante para esta comarca de la zona sur de la provincia», ha dicho el presidente de la Diputación de Guadalajara, José Luis Vega, que ha estado acompañado por el presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha, Pablo Bellido, y el alcalde de Sacedón, Francisco Pérez Torrecilla. Vega recuerda que el proyecto se redactó en 2009, pero no ha sido hasta este año cuando se ha redactado uno nuevo, más moderno y «al uso».

El proyecto contempla un edificio exento de 1.062 metros cuadrados, formado por tres módulos unidos. En el primero de ellos, a dos alturas, estará la vivienda y la zona de administración. El segundo se reservará a los camiones de bomberos, con cuatro calles que permitirán incorporar hasta ocho vehículos. Y el tercero será para almacenaje y jaulas, donde se guardarán los equipos necesarios de extinción. También se urbanizará la zona exterior del edificio, con varias plataformas de maniobras y de mantenimiento de vehículos, además de aparcamiento y un espacio para la futura torre de entrenamiento.

El nuevo parque dará servicio a unos 15.000 vecinos de unos 45 municipios de la comarca. Cuando esté listo, los bomberos tardarán menos de 20 minutos en atender un siniestro en Pareja (ahora se supera la hora); en Salmerón se pasará de 70 a 25 minutos; en Auñón, de 45 a 15; y en Illana, de 75 o más a 25.

«Hoy ponemos la primera piedra de una infraestructura destinada a salvar vidas y proteger los intereses de todos los vecinos de esta comarca y espero que esta muestra de voluntad política por mejorar la vida de los ciudadanos sirva como ejemplo para que nunca más un gobernante vuelva a jugar con la seguridad y el futuro de nuestros vecinos», ha señalado el alcalde, Pérez Torrecilla, quien siente «un temendo descanso tras muchos años de lucha, mentiras, falsedades, horas sin dormir y sufrimiento».