SEQUÍA
Las parroquias estudian sacar a los santos en procesión si sigue sin llover
El estado de los pantanos es preocupante y los agricultores no pueden sembrar el cereal
Aunque para hoy y mañana existe previsión meteorológica de lluvias, —bien es cierto que no muy abundantes y de corta duración—, la ausencia de precipitaciones prácticamente desde el mes de octubre en la zona centro del país ha propiciado un ambiente de hondo pesimismo entre las gentes del campo , hasta el punto de que numerosos agricultores se preguntan por el futuro de sus cosechas.
Dada la sequía reinante, algunos agricultores aún no han podido sembrar el cerea l y los que lo han hecho dudan de que germine, en la línea por lo denunciado recientemente por las organizaciones agrarias, que sitúan las previsiones de pérdidas entre un 30 y un 40 por ciento.
Según ha sabido ABC, en algunas localidades de la provincia de Toledo las parroquias están recibiendo peticiones para sacar a los santos en procesión en petición de lluvias. Costumbre ancestral ésta tan generalizada en el medio rural cuando llega la sequía de sacar en procesiones de rogativas a las vírgenes y a los santos que cada pueblo tiene por patrono para implorar que la lluvia caiga sobre los campos sedientos. El santo que con más frecuencia es sacado en procesión es San Isidro Labrador.
Rogativas aparte, lo cierto es que ha comenzado un periodo de sequía, al menos en la cuenca del Tajo , mientras que la del Segura mira con preocupación el estado de los pantanos de cabecera, en la provincia de Guadalajata, de los que depende su futuro y prosperidad.
El presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), Miguel Ángel Ródenas, ha señalado a Europa Press que la palabra del trimestre ha sido de «sequía» en la que la cuenca del Segura está inmersa en lo que respecta al trasvase, aunque reconoce que todo el mundo ha podido regar «a pesar de la sequía». De manera que el cierre de final de año «no es tan malo, pero en cuanto al trasvase es preocupante y habrá que tomar todo tipo de medidas extraordinarias, amparados por el Decreto de Sequía y medidas de contención de ahorro de agua» de cara a 2016.
Catástrofe económica
«Tenemos 130.000 hectáreas en las zonas regables del trasvase, es una zona viva con seres vivos, y si no tienen agua sería una catástrofe económica de miles de millones de euros en pérdidas y daños ambientales; una situación desoladora». Las previsiones de este trimestre apuntan a que «vamos por debajo de la media de los últimos cinco y diez años. Apenas ha llovido un litro por m2 en diciembre, una cifra muy baja, y la aportación interanual en la demarcación hidrográfica, 280 hm3, se encuentra por debajo de las necesidades de agua de la cuenca , que están en 400 hm3 aproximadamente». Reconoce que se está superando la situación «gracias a un buen estado de los embalses de cabecera y esperamos terminar el año hidrológico y este trimestre con una situación de normalidad en la cuenca en la parte de regadío tradicional por las reservas almacenadas, que están bajando».
Sin embargo, la situación en la parte del trasvase «es muy grave», que califica de emergencia, ya que la cabecera del Tajo «no tiene recursos en este momento y las previsiones para el año que empieza, en los primeros tres meses, serán muy malas y de trasvases mínimos, si es que los hay». «Estamos en precario y dependemos de que llueva en el Tajo» , subraya Ródenas.
Y en cabecera del Tajo también dependen de que llueva, puesto que es tal la merma de agua en los pantanos de Entrepeñas y Buendía que incluso peligra el abastecimiento de agua a las poblaciones de la comarca. De ahí que la aprobación de un nuevo trasvase en diciembre sea considerada por el Gobierno regional de «ilegal» .