El Hospital de Guadalajara intenta cercar a la EPOC
Presenta un protocolo para detectarlo de forma certera y crear organismos de alerta ya desde la Atención Primaria
La Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica , más conocida por sus siglas EPOC, es el estrechamiento de las vías respiratorias, una dolencia crónica que muchas veces se resiste al diagnóstico o se confunde con otras patologías. Para luchar contra esta situación, profesionales de los servicios de Neumología, Farmacia y de Atención Primaria del Área Integrada de Guadalajara, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, han diseñado un protocolo que será presentado este miércoles en una sesión clínica en el Hospital General Universitario de Guadalajara, coincidiendo con la celebración del Día Mundial de esta enfermedad.
La EPOC afecta nada más y nada menos que al 10 por ciento de la población mayor de 40 años , siendo una de las principales causas de muerte en todos los países desarrollados, con tendencias ascendentes durante las últimas dos décadas. Concretamente en España, representa la cuarta causa de muerte, con una tasa global de 33 casos por 100.000 habitantes, que se eleva a 176 por 100.000 habitantes en mayores de 75 años. En nuestro país, unos 18.000 pacientes mueren cada año a causa de esta patología. Además presentan picos de empeoramiento, sobre todo en invierno, llegando a causar colapso en los hospitales. «Se estima que esta enfermedad es responsable del 2 por ciento del gasto sanitario total », explican desde la Consejería de Sanidad.
«A pesar de su gran importancia sanitaria, diversos estudios realizados en España, confirman graves deficiencias en su diagnóstico con elevadas tasas de infradiagnóstico, pero también con diagnósticos erróneos que pueden llegar afectar más del 30 por ciento de los pacientes». Para ello se crea el protocolo.
Un grupo especializado en Guadalajara
Durante el último año se ha constituido en el Área Integrada de Guadalajara un grupo multidisciplinar de EPOC, con médicos de Neumología, Atención Primaria y Servicio de Farmacia, cuyo trabajo de campo ha permitido confirmar las deficiencias que existen en el manejo de esta enfermedad. De hecho, algunas de las primeras aportaciones de este grupo han sido premiadas en congresos nacionales en los últimos meses.
Tras una primera fase de análisis, y ante la confusión que existe actualmentesobre esta dolencia con Guías Clínicas que transmiten mensajes no siempre consistentes, se ha diseñado un plan de actuación «sencillo» y dirigido a los profesionales sanitarios que permita dar cerco a esta enfermedad.
Este protocolo aborda aspectos técnicos que pueden resumirse en cinco puntos . En primer lugar, mejorar la calidad del diagnóstico mediante el uso de sistema de función pulmonar simplificados y la difusión de la espirometría -la sencilla prueba a través de la cual se hace un diagnóstico certero de la EPOC-. Asimismo, contempla crear cauces ágiles de comunicación entre Atención Primaria y el servicio de Neumología para que todo paciente pueda tener una valoración correcta, especialmente en pacientes jóvenes y complejos.
En tercer lugar, pretende fomentar las medidas preventivas , como dejar de fumar, fomentar la actividad física regular y vacunación antigripal y neumocócica. Por otra parte, establece la creación de pautas ordenadas de tratamiento que reduzcan la confusión existente actualmente motivada por una gran proliferación de fármacos y dispositivos de inhalación. Y, finalmente, evitar el uso excesivo de medicación innecesaria que han detectado en ciertos grupos de pacientes en los análisis previos de auditoría.