Cuatro detenidos por una ciberestafa de 34.000 euros a una empresa de Almadén mediante el «phishing»

Los delincuentes lograron retirar el dinero de una cuenta bancaria

La Guardia Civil, que investiga a una quinta persona, practicó los arrestos en las localidades madrileñas de Villanueva del Pardillo y Boadilla del Monte, además del municipio sevillano de Dos Hermanas

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La Guardia Civil ha detenido a cuatro personas e investigado a otra más como presuntas autoras de un delito de estafa telemática. Se les acusa de engañar a una empresa de Almadén (Ciudad Real) para apropiarse de 34.000 euros mediante el «phishing», una técnica fraudulenta en internet .

Los hechos que originaron la Operación Pizarras ocurrieron hace unos dos meses. Los agentes al frente de la investigación tuvieron conocimiento de una supuesta estafa informática con la que unos ciberdelincuentes retiraron 34.000 euros de la cuenta bancaria de una empresa de la localidad manchega.

El rastro del dinero llevó a los guardias al estudio de una abundante documentación y a una conclusión: los ladrones utilizaron el método conocido como «phishing». Esta extendida técnica consiste en engañar a la víctima y hacer que comparta contraseñas, números de tarjetas de crédito y más información confidencial. Los cacos se hacen pasar, generalmente, por una institución de confianza en un mensaje de correo electrónico o una llamada telefónica.

La explotación de esta operación se produjo hace unos días, según ha informado la Guardia Civil de Ciudad Real este viernes. Los agentes localizaron y detuvieron a cuatro personas e investigaron a otra más en las localidades madrileñas de Villanueva del Pardillo y Boadilla del Monte, además del municipio sevillano de Dos Hermanas.

Información sensible

El 15 de enero, ABC informó de otra ola de este delito informático, que reaparece periódicamente y que se ha vuelto a extender en las tres últimas semanas. La Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas de Castilla-La Mancha advertía entonces a todo el personal dependiente de la Junta de Comunidades de una ciberestafa en la que los delincuentes se hacían pasar por servicio de Microsoft .

Once días después, la Policía Nacional alertaba de esta práctica en la ciudad de Toledo , donde había habido varios intentos por medio de llamadas telefónicas. En ellas se suplanta al personal de la compañía tecnológica estadounidense para hacerse con información sensible alojada en el ordenador de la víctima y utilizarla para obtener dinero de sus cuentas.

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