El Rey destaca que los deportistas olímpicos son «un orgullo para España, con medalla o sin ella»
Don Felipe y Doña Letizia presidieron esta tarde a la XVI gala anual del Comité Olímpico Español
Los Reyes Don Felipe y Doña Letizia presidieron esta tarde a la XVI gala anual del Comité Olímpico Español, donde se homenajeó a los deportistas olímpicos de los Juegos de Tokio 2020. Un encuentro donde se pudo ver a las estrellas del deporte español sin chándal. Vestidos de gala en una noche que, en palabras del Rey, permitió «recordar y compartir los hitos y satisfacciones que nos ha dejado este año».
Saúl Cravioto, Alberto Ginés, Adriana Cerezo, Raúl Entrerríos y Ona Carbonell, fueron algunos de los rostros del deporte que acudieron a la gala, a la que también asistió el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida y el Ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta.
«De cada uno de los más de 300 deportistas olímpicos que nos representaron en Tokio, nos sentimos profundamente orgullosos. Debutantes, veteranos, conocidos o jóvenes promesas. Todos sois un orgullo para España: con medalla o sin ella, con diploma o sin él», afirmó el Rey Felipe, al tiempo que añadió que todos ellos son «un ejemplo a seguir» por su «profundo respeto por esos valores olímpicos que, sin duda, lo son también de la vida, especialmente de la vida bajo un orden democrático y de respeto de los Derechos Humanos, como son la excelencia, la amistad, el respeto a los demás, el juego limpio y el acatamiento de las reglas de juego».
El Rey recordó que «en menos de tres años esperamos estar disfrutando de la cita olímpica de Paris»: «No podemos sino imaginar que, en 2024, España seguirá mostrándose al mundo como un referente también en el deporte, como un país comprometido con sus deportistas y con el olimpismo». Destacó que los o deportistas olímpicos y paralímpicos encarnan «muchas certezas, virtudes y bondades que son reflejo de un país y de sus ciudadanos». «Sois, por tanto, un reflejo de lo mejor de nuestra sociedad». Así, el Rey resaltó a los deportistas olímpicos que sus sueños, los que les han llevado tan lejos en el deporte, «se proyectan también sobre las esperanzas de 47 millones de españoles», que ven en ellos una «fuente de inspiración» por su «trabajo constante, afán de superación, capacidad de esfuerzo, perseverancia y determinación». «Tan importante como la victoria es la competición honesta y el respeto hacia el rival”, comentó.
Mencionó el Rey a Saúl Cravioto y Mireia Belmonte, «un hombre y una mujer» abanderados de los Juegos Olímpicos de Tokio, que «ya están inscritos en la historia del deporte español». «Esa sociedad con igualdad de oportunidades es la que estáis construyendo para las próximas generaciones. Y para ello, el olimpismo es, sin ninguna duda, una herramienta sumamente útil y poderosa», concluyó el Rey.
