Pablo Paz - Arando en el mar
Vientos favorables para el turismo canario
Qué duda cabe que nuestras playas siguen despertando un gran interés entre nuestros visitantes
Debido que en Canarias no existe una norma estatal básica que sea capaz de regular urbanísticamente los diversos enclaves turísticos, existen Cabildos, como el de La Palma, La Gomera o El Hierro, que se apresuran a presentar proposiciones de ley para modificar la actual norma de ordenación territorial turística de dichas islas, lo que va en contra del propio modelo territorial elegido por los distintos gobiernos canarios, y que se basa fundamentalmente en el “uso racional y duraderos de los diversos recursos naturales” de nuestras islas.
No podemos, pues, seguir aumentando la densidad alojativa relacionada con el turismo, sobre todo ocupando suelo rústico; debemos preservar nuestra tierra, nuestros maravillosos paisajes y cuidar el entorno natural que es el que hace que nuestro archipiélago sea único y maravilloso en su diversidad. Si crecemos lo debemos hacer en calidad no en cantidad; cuidando y manteniendo lo que tenemos; mejorando los alojamientos turísticos y las instalaciones e infraestructuras, así como el entorno; y, como no, mimando a nuestros visitantes con nuestra conocida y apreciada hospitalidad.
Tal vez por ello, sigamos siendo el destino turístico de millones de personas que nos eligen para visitarnos, divertirse y descansar. Y tenemos la suerte de que muchos de esos visitantes son reincidentes porque descubren que no sólo Canarias ofrece sol y playa; sino que encuentran seguridad, amabilidad y hospitalidad en un entorno encantador y paradisíaco y, de camino, descubren nuestra tierra, cultura y tradiciones; nuestra gastronomía, nuestros pueblos y ciudades.
Pero qué duda cabe que nuestras playas siguen despertando un gran interés entre nuestros visitantes; de hecho, este año España lidera el ranking mundial con la distinción de las “Banderas Azules”; y Canarias ha obtenido 50 de dichas banderas repartidas entre playas (45) y puertos (5); cuatro más que en el año 2015; constituyendo dichas distinciones un reclamo turístico y un valor diferencial y añadido con respecto a otros destinos competidores nuestros.
Los datos no engañan: en el primer trimestre de este año el flujo de turistas ha aumentado, por ejemplo en Tenerife, cerca de un 9 % traduciéndose en más de 100.000 personas más que en el mismo periodo del año pasado. Siendo el Reino Unido el primer mercado emisor de turistas ya que en dicho primer trimestre nos han visitado cerca de medio millón de británicos. Le sigue, aunque parezca mentira, el turismo peninsular con algo más de 200.000 y seguido de los alemanes.