Los 'cazadores de pulpos', un delito que cobra fuerza en Canarias
La Guardia Civil interviene más de 18 kilos de pulpo capturado en zona prohibida y utilizando artes de pesca no permitidos
Agentes de la Guardia Civil del Puesto Principal de Candelaria, durante la prestación de un servicio de prevención de la seguridad ciudadana, ha sorprendido a dos personas cuando aún portaban los 18,6 kilos de pulpo que acababan de capturar de forma ilícita.
Los infractores han sido propuestos para diversas sanciones por varias infracciones a la Ley 17/2003 de Pesca de Canarias, ya que este delito que está cobrando cada vez más fuerza no se deriva únicamente de la captura realizada en zona prohibida, sino también por haber utilizado artes de pesca no permitidas (bichero-fija).
El total de piezas capturadas, 13 pulpos , además incumplía la limitación establecida en la normativa en relación con el máximo de 5 kilos de pesca de esa especie, así como que cinco de esas piezas, arrojaban un peso inferior a 1 kilo, lo que supone un riesgo alto para la propia especie, por lo que está prohibida su captura.
Cabe destacar que ambos infractores son pescadores habituales y que tenían la licencia de pesca preceptiva, lo que demuestra que eran plenamente conscientes de las infracciones que estaban cometiendo.
Los agentes de la Guardia Civil notificaron un total de cinco infracciones.
El pulpo, víctima de pesca ilegal
En el último año se han multiplicado los delitos de este tipo, ya que los agentes de Inspección Pesquera de la Dirección General de Pesca del Gobierno de Canarias han tenido que incautar varias capturas ilegales.
En el mes de marzo de 2021, se incautaron en solo 4 días se interceptaron un total de 57 kilos de pulpos capturados ilegalmente en diferentes zonas de la isla de La Palma, así como 17 kilos de medregal procedente de la pesca furtiva que fueron comercializados ilegalmente.
El mismo mes, la Guardia Civil intervino las 12 piezas de 10 kilos totales de pulpo que habían capturado dos varones, en este caso también en Tenerife. Estos dos pescadores habían capturado 12 pulpos, 5 de ellos con un peso inferior de 1 kilo.
En verano, la Guardia Civil denunció a un hombre que fue interceptado en la costa de Tacoronte (Tenerife) al salir del agua con un fusil de pesca submarina y una pesca furtiva que acumulaba un peso de 15 kilos. Además, tres mujeres aguardaban a este pescador furtivo para comprarle las capturas. La captura incluía varios ejemplares de pulpo inmaduro.
No solo ocurre en Canarias, la Guardia Civil liberó en septiembre 265 kilos de pulpos atrapados en nasas ilegales en Santoña, en el marco de la Operación Santolagarro.
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