Política
El «tuneo» policial de Podemos que les va a costar 144.000 euros a los zaragozanos
El alcalde Santisteve consuma su plan para disolver la unidad especial de intervención, restarle la actual función operativa de sus agentes. Esto incluye cambiarles el uniforme, lo que dejará una factura de miles de euros
La coalición ZEC ( Podemos-IU ) que gobierna el Ayuntamiento de Zaragoza ha consumado su plan para «tunear» la unidad especial de intervención de la Policía Local y restarle su actual función operativa. Es una decisión polémica tras la que el gobierno del alcalde Pedro Santisteve lleva prácticamente desde que arrancó la legislatura y que ha decidido aplicar en firme, según anunció oficialmente este martes. Supondrá la disolución formal de la actual Unidad de Apoyo Operativo (UAPO), aunque será más una medida estética que realmente práctica. Eso sí, con un coste de 144.000 euros en cambio de uniformes .
Hace meses, un informe interno del Ayuntamiento evaluó económicamente las consecuencias de cambiarle el nombre a la UAPO. Es lo que costará dotar de nuevos uniformes, de nueva estética textil, a los 114 agentes que conforman la actual UAPO, que pasará a denominarse Unidad de Refuerzo Flexible (URF), según indicó este miércoles la concejala de Policía Local por la coalición Podemos-IU, Elena Giner.
El gobierno municipal de Santisteve también quiere reorientar la actividad de estos agentes. Hasta ahora eran las unidades de intervención especializada en zonas o situaciones especialmente conflictivas. Y las órbitas de Podemos e IU las pusieron en su punto de mira político. Cabe recordar las fiestas antipoliciales apoyadas por el gobierno de Santisteve, en cuya cartelería llegó a cargarse expresamente contra la UAPO.
Elena Giner dice ahora que los agentes que están destinados a esta unidad especial de la Policía Local pasarán a dedicarse a «reforzar la actuación del resto de unidades cuando esta sea necesario, en especial de las funciones relacionadas con la prevención y la proximidad».
La disolución de la UAPO y su reconversión en una unidad con nuevo nombre ha sido criticada por los grupos de la oposición y también cuestionada desde colectivos ciudadanos y empresariales.
