Tribunales

Trifulca entre la magistrada del «crimen de los tirantes» y el abogado Endika Zulueta tras el veredicto

La juez Gil Corredera perdió los nervios ante la actitud del defensor del antisistema Rodrigo Lanza, durante la última sesión antes de dictar sentencia

La magistrada Gil Corredera y el abogado Zulueta se enzarzaron en un sonoro rifirrafe, con gritos incluidos ABC

R. P.

La magistrada que ha presidido el juicio por el «crimen de los tirantes», María José Gil Corredera , y el abogado Endika Zulueta , defensor del antisistema Rodrigo Lanza, protagonizaron este jueves una trifulca verbal durante la última sesión antes de dictar sentencia.

El enfrentamiento acabó a gritos en la sala de la Audiencia Provincial de Zaragoza donde ha tenido lugar la sesión. Fue en el momento en el que fiscalía, acusación y defensa tuvieron que plantear su solicitud de pena a tenor del veredicto que acaba de leer el portavoz del jurado, que ha concluido que Lanza es culpable de un delito de asesinato con alevosía y agravado por motivación ideológica -mató a su víctima por considerar que era «facha»-.

La intervención de Zulueta generó la protesta de los abogados de la acusación particular, que, al entender que no se estaba ajustando a las reglas procedimientales, pidieron a la magistrada que pusiera coto a las apreciaciones que estaba realizando el abogado defensor.

Al sentirse interrumpido, Zulueta reclamó a la magistrada que le amparara. «Señora magistrada, ruego que me ampare», pidió repetidamente Zulueta, mientras la juez atendía lo que le estaba apuntando el abogado de la acusación particular. «Vamos a dejarlo que termine», dijo la magistrada en un tono que irritó al abogado del antisistema.

«Vamos a dejarle que termine, no. Ruego que me ampare», volvió a exigir Zulueta, molesto con la juez, ante lo que la magistrada perdió los nervios y le contestó, gritando: «¡Es lo mismo!» , a lo que el abogado replicó con mayor tono de exigencia «ruego que me ampare». «Le estoy amparando», se justificó la juez.

«Le estoy diciendo que continúe», volvió a decirle la magistrada, ante lo que Zulueta volvió a reiterar la queja. La juez, visiblemente alterada, le replicó con un «a mí no me grite».

«Es muy desagradable», afirmó después Gil Corredera en repetidas ocasiones. La magistrada volvió a mostrar su incomodidad por el desarrollo del proceso, un desagrado que ya verbalizó al principio del juicio, cuando en plena vista llegó a afirmar que «si pudiera, me marchaba» . Este jueves, de nuevo, proclamó de viva voz su deseo de despachar este caso: «Es muy desagradable y este juicio yo estoy esperando que termine», afirmó.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación