Política
Sánchez visita Zaragoza y revuelve al PP: «¿A qué viene, a celebrar que ha soltado al etarra Pakito?»
Pedro Sánchez será recibido el viernes por el presidente aragonés, Javier Lambán, justo una semana después de que fuera excarcelado Francisco Múgica Garmendia, el exjefe de ETA que mandó volar la casa-cuartel de Zaragoza en 1987
La visita programada por el presidente Pedro Sánchez a Zaragoza para el próximo viernes ha generado polémica y una dura respuesta por parte del PP . A través de un comunicado, los populares han vinculado esta visita con la reciente excarcelación de Francisco Múgica Garmendia, «Pakito», el exjefe de ETA que ordenó la masacre de la casa-cuartel de Zaragoza y que fue puesto en libertad el pasado viernes , justo el día que se conmemoró el 33 aniversario de aquella matanza con coche-bomba que segó la vida de 11 personas, cinco de ellas niñas.
Según han anunciado desde el Gobierno de Aragón, Sánchez visitará Zaragoza para presentar el denominado «Plan de Recuperación» que ha diseñado el Gobierno para remontar la crisis del coronavirus. Pedro Sánchez será recibido en la sede del Ejecutivo aragonés por el presidente de la Comunidad y líder regional del PSOE, Javier Lambán, y mantendrán un encuentro con empresarios.
La visita ha desencadenado revuelo político. El presidente del PP en la provincia de Zaragoza y diputado regional, Ramón Celma, ha cargado contra el PSOE por considerar esa visita «un insulto a los zaragozanos». «¿A qué viene Pedro Sánchez a Zaragoza, a celebrar que ha soltado al etarra Pakito en el aniversario de la masacre de la casa-cuartel?» , ha afirmado Celma.
A juicio de los populares, «es una vergüenza y un insulto a todos los zaragozanos que Lambán reciba al que, junto a su socio Otegi, ha soltado al terrorista Pakito» .
Celma ha cargado contra Lambán, al que acusa de «postureo» y de plegarse a Sánchez y a sus postulados mientras «se hace el indignado con los grandes temas nacionales». Este dirigente del PP ha reclamado a Lambán que «no se venda» y que traslade a Sánchez «la indignación de Zaragoza por haber querido contentar a su socio Otegi soltando al etarra Pakito en un aniversario tan triste y doloroso».
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