Sociedad
Repudiado por su pueblo hasta en el cementerio
El Justicia de Aragón desvela, sin detallar el nombre del pueblo, el caso de un camposanto conflictivo porque nadie quiere que le entierren cerca de uno de sus vecinos
![El Justicia de Aragón ha advertido contra los precios discriminatorios que aplican algunos ayuntamientos a la hora de vender espacio en los cementerios, según sea para un lugareño o para un forastero](https://s3.abcstatics.com/media/espana/2016/05/11/cementerio--620x349.jpg)
La inmediatez de trato propia de los pequeños pueblos hace que las amistades, cuando las hay, sean mucho más estrechas, pero también que las enemistades multipliquen sus efectos. En algún caso, llegan hasta el descanso eterno, como el caso que ha desvelado hoy en las Cortes regionales el Justicia de Aragón, Fernando García Vicente .
Ha explicado cómo un aragonés acudió a él pidiéndole ayuda para que mediara ante el ayuntamiento de su pueblo. El objetivo: que le dieran un nicho distinto que el que le habían asignado para cuando muriera y tuviera que ser enterrado. El motivo: que el nicho que le había tocado estaba al lado de otro vecino del pueblo con el que se llevaba fatal . Y lo último que quería era tener que compartir descanso eterno en vecindad con él.
El Justicia no ha revelado el nombre del pueblo. Pero ha puesto este caso como ejemplo de las peticiones de ayuda a las que no puede responder con eficacia el Justiciazgo, «porque la solución es imposible».
García Vicente ha dado detalles de ese episodio en concreto. Y lo ha hecho ante los diputados de las Cortes de Aragón. «Un señor me mandó una carta diciéndome que en su pueblo van a ampliar el cementerio y que le han puesto debajo de fulanito, y me decía si podía hacer algo para que le cambiaran de sitio. Llamé al alcalde y me dijo que este problema no tiene solución porque uno de los dos se lleva mal con todo el pueblo, así que nadie va a querer estar al lado de él toda la eternidad».
Al margen de esta anécdota, el Justicia ha alertado sobre otra cuestión relacionada con los cementerios y para la que ha pedido que las autoridades se tomen interés: el variable precio que se cobra en algunas localidades por un mismo nicho, según que el cadáver que lo ocupe sea el de un lugareño o el de un forastero.
«Nos hemos encontrado ayuntamientos en los que se cobra el triple al del pueblo que al forastero a la hora de enterrarlo, y eso no puede ser», ha advertido García Vicente.