El Pirineo, lleno de nieve en plena primavera

El Pirineo sigue siendo este año, en plena primavera, un gigantesco embalse helado . Guarda una cantidad de nieve que no se veía desde hace muchos años. En estos momentos, las cumbres que vierten a ríos de la cuenca del Ebro guardan 1.600 hectómetros cúbicos de agua en forma de nieve, que garantiza unas aportaciones hídricas de envergadura de aquí al verano.

Esos 1.600 hectómetros cúbicos de nieve nutrirán los ríos de la cuenca del Ebro con casi mil hectómetros cúbicos de agua. Como ocurre cada año, que se pueda aprovechar más o menos ese caudal dependerá de que el deshielo sea más o menos acelerado. Hasta ahora no se han producido episodios de deshielos bruscos, algo que sí ha ocurrido otras veces y que, en ocasiones, ha llegado a producir desbordamientos del Ebro si se combinan subidas de temperaturas y lluvias intensas.

La reserva de nieve volvió siguió aumentando en la vertiente española del Pirineo en esta segunda quincena de marzo por la bajada de temperaturas y las precipitaciones que se produjeron en días pasados.

Ahora, la reserva de nieve se aproxima a la que había en febrero, cuando se alcanzó el máximo de la actual temporada. Esos 1.600 hectómetros cúbicos de agua helada que guardan las cumbres de la cuenca del Ebro son un 8% superiores a los que había hace un año en estas mismas fechas, y casi un 20% mayores que el promedio del último quinquenio en este momento del año.

El grueso de estas reservas de nieve se concentran en el tramo aragonés del Pirineo y en la zona occidental del Pirineo catalán.