INFRESTRUCTURAS
La niebla, un lastre para el Aeropuerto de Zaragoza
En los últimos días, tres aeronaves no han podido aterrizar en la capital aragonesa. El aeropuerto sigue a la espera de un sistema de radares que permita tomar tierra a los aviones a pesar de la niebla
Zaragoza es una de las ciudades españolas que más días con niebla tiene al cabo del año. Un fenómeno que sufren con especial incidencia en el Aeropuerto, que en pleno siglo XXI no está preparado para hacer frente a este fenómeno meteorológico.
Así que en la última semana dos vuelos han tenido que ser desviados y otro ha sufrido importantes retrasos. En concreto se han visto afectados, los pasajeros de un vuelo de Ryanair procedente de París, que no pudo aterrizar en Zaragoza, y los de la compañía Vueling que venían de Palma de Mallorca. En este caso, se optó por retrasar el despegue más de tres horas. Además, un vuelo de mercancías que cubría la ruta Barcelona Zaragoza tuvo que tomar tierra en Madrid.
La situación no es nueva. Se repite todos los años por estas fechas, y todo porque aún no se ha implantado el sistema que permite aterrizar a los aviones a pesar de que la niebla sea densa. La puesta en marcha de esta herramienta fue una promesa del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero que nunca llegó a cumplirse.
En su día, el Gobierno socialista comprometió una partida presupuestaria de 500.000 euros para dotar al aeropuerto de este sistema antiniebla. Sin embargo, el dinero no ha llegado y la niebla sigue pasando más de una mala pasada al aeropuerto.
Y a día de hoy, el ILS –como se conoce a este sistema– todavía no está en funcionamiento en Zaragoza. Según las previsiones de Aena este sistema de radares estará listo el próximo mes de marzo.
El ILS es una ayuda a la navegación aérea que se usa cuando el avión se está acercando al aeropuerto. Se trata de un sistema que emite señales radioeléctricas a los aviones para que puedan tomar tierra, dándoles información fiable a pesar de que no haya mucha visibilidad. Dispone de un localizador que proporciona a la aeronave una pauta de su situación respecto a la pista de aterrizaje.
En España Vigo, Madrid, Santiago de Compostela, Barcelona y Asturias son algunos de los aeropuertos que tienen la categoría más avanzada de este sistema que permite aterrizar a los aviones en todo momento, incluso cuando la visibilidad es nula. En Zaragoza, hay un sistema de inferior grado que, en los días de mucha niebla, no facilita la labor de los pilotos. De ahí que hayan sido varios los vuelos que, en estos años, se hayan tenido que desviar, con el consiguiente coste económico que eso tiene para las aerolíneas.
Su implantación es clave para el desarrollo de esta infraestructura, sobre todo para los vuelos de mercancías. Es el tercero con mayor tráfico solo por detrás de Barajas y el Prat. Desde el Aeropuerto de Zaragoza operan todos los días varios vuelos con mercancía textil y con productos perecederos hacia países del lejano Oriente, medio Oriente, México y Sudáfrica. Y más del 95 por ciento de las mercancías que entran o salen por este aeropuerto corresponden a rutas internacionales.