Sanidad
Los médicos aragoneses de cabecera reclaman un nuevo modelo para reducir la saturación en las consultas
Entre sus demandas clave figuran potenciar las unidades de triaje en Atención Primaria para dar prioridad a los casos más urgentes y derivar fuera de las consultas el trabajo burocrático
El actual modelo organizativo de las consultas de los médicos de cabecera no permite garantizar una atención óptima y suficientemente ágil a los pacientes en Aragón . Esa es la reflexión de partida que ha dado lugar al plan de reforma propuesto por los sindicatos de médicos de Atención Primaria de Aragón ( Fasamet y CESM-Aragón ). Incluye una serie de reformas organizativas que, según sus promotores, agilizaría la atención médica, permitiría atender los nuevos casos en el mismo día -sin someterlos a lista de espera- y garantizaría que el facultativo pudiera dedicar más tiempo a cada visita, en función de las necesidades y complejidad de cada caso.
El nuevo modelo que proponen los médicos de cabecera aragoneses acaba de ser presentado al gerente del Servicio Aragonés de Salud (Gobierno de Aragón), José María Arnal.
Uno de los puntos clave de la propuesta consiste en potenciar el servicio de triaje en los centros de Atención Primaria . Es decir, que en las unidades de admisión -antes de llegar a la consulta-, el personal disponga de un cuestionario básico con el que poder realizar, de forma fiable, una selección de las solicitudes de cita con el médico de cabecera.
De esa forma, las unidades de admisión pueden derivar al canal adecuado cada caso: darle cita para ese mismo día, si se trata de un caso nuevo que lo requiere por la entidad de la patología; derivarlo a otro servicio administrativo en caso de demandas de carácter burocrático; o darle cita previa para otro día en caso de pacientes no urgentes que solo requieren revisiones, tanto médicas como de enfermería.
Según estos sindicatos médicos, el modelo que proponen es mucho más eficiente de cara a los usuarios, frente al que rige actualmente: se les da cita por turno de llegada, lo que genera listas de espera sistemáticas, sea cual sea la circunstancia.
De modo complementario, también reclaman que se revise y actualice el número de tarjetas sanitarias que tiene asignadas cada médico de Atención Primaria . Subrayan que debe garantizarse un máximo de 1.500-1.700 para los médicos de familia, y 900-1.100 para los pediatras.
Los médicos de Atención Primaria señalan que con todas estas medidas se lograría limitar a entre 30 y 35 los pacientes atendidos diariamente con cita previa -ahora llegan a ser el doble-. Y eso permitiría disponer de huecos estructurales para atender hasta 7 casos más cada día, así como establecer turnos adecuados en los equipos de Atención Primaria para atender las urgencias reales.
«El objetivo es que este mismo año los profesionales dispongan de un mínimo de 7 minutos por paciente, 15 minutos para pacientes complejos, media hora al día para telemedicina , y un tiempo para investigación y formación», han indicado estos sindicatos médicos de Atención Primaria.